"La industria europea de pesca de aguas profundas necesita mejoras de gestión pero basadas en hechos y no en miedos", en alusión a las restricciones pesqueras que defiende la Comisión Europea ante la falta de datos científicos sobre el estado de algunos recursos o los efectos de las técnicas de pesca. Es lo que reclamó ayer en Edimburgo el vigués Iván López, en representación del sector comunitario de pesca de profundidad, que durante dos días se reunió con representantes de tres consejos consultivos regionales, la propia CE, la Agencia Comunitaria de Pesca, científicos y distintas ONGs. El sector español estuvo representado, además, por el vicepresidente y el secretario general de Cepesca, José Manuel Liria y Javier Garat, respectivamente.

El objetivo del encuentro era analizar y valorar la propuesta de la CE de prohibir en dos años el uso de artes de arrastre y enmalle de fondo para proteger la las especies de aguas profundas y los fondos marinos vulnerables en el Atlántico Nordeste. La propuesta tiene en pie de guerra al sector, que ve que detrás un intento por generalizar el veto a todo el arrastre, de gran importancia en la flota española y gallega. López señaló que "nuestros métodos y técnicas seguirán garantizando un esfuerzo de pesca cada vez más sostenible y acogemos con satisfacción los objetivos de la iniciativa de la Comisión, pero estamos fundamentalmente en desacuerdo con el enfoque que la CE le está dando". Por ello, calificó "despropocionada" la prohibición de un arte de pesca.

El sector apostó por mejorar la gestión pesquera cuando se vea necesario, la información científica y por que se le escuche y s etenga en cuenta su conocimiento del medio y las técnicas ante la toma de decisiones tan "drásticas". Además se recordaron los "esfuerzos" de colaboración con los científicos para "conocer y proteger los fondos y las especies vulnerables", lo que se ha traducido en mejoras reconocidas en especies de profundidad como la maruca azul o el granadero.

Entre los acuerdos "informales" adoptados en la reunión, citar el de "reforzar las medidas de la UE para proteger los hábitats, en particular mediante la armonización con las medidas vigentes en otras áreas, aumentar la cooperación entre la industria y los científicos, que ya ha hecho posible mejorar la calidad de los datos sobre los recursos y crear un marco regulador para la pesca en alta mar, por lo que los buques de la UE no están en desventaja económica competitiva frente a terceros países".

El veto al arrastre de profundidad será analizado de nuevo el próximo mes de junio por la Comisión de Pesca del Parlamento Europeo, en una segunda audición a la que se llega tras las quejas del sector por el formato elegido para la primera, que impidó exponer su postura.