Tras años de reivindicaciones -amparadas por las elevadas tasas de actividad que superaron con creces los índices recomendados por el CGPJ- la nueva sala de Familia ya es una realidad en Vigo. El Juzgado de Primera Instancia número 15 especializado en separaciones y divorcios recibe hoy sus primeras demandas, que se sumarán a las peticiones de internamiento por parte de los servicios sociales o ratificación de incapacidades. Y es que el trabajo de este tribunal en los próximos meses será cuantioso. Para equilibrar la carga de asuntos a la de los otros dos juzgados de Familia de la ciudad, el órgano emplazado en el edificio de la Gota de Leche asumirá de forma exclusiva todas las demandas entrantes en materia de Familia.
Esta exención en el reparto se mantendrá hasta finales de julio, y en septiembre (agosto es un mes inhábil para la presentación de demandas) volverá el turno normal, es decir, las demandas entrantes se repartirán entre los tres juzgados. Además, los internamientos urgentes tanto en centros psiquiátricos como en geriátricos también los tramitará esta nueva sala durante sus tres primeros meses. "Las otras salas cuentan con procedimientos atrasados, tienen señalamientos fijados, juicios, etc. Para librarlos de más trabajo y equilibrarnos durante los próximos tres meses, nos encargaremos de las incapacidades y también durante seis meses del reparto exclusivo", argumenta su magistrado titular, Daniel Tomás López, quien hasta ahora asumía este cargo en el Juzgado de Familia número 12 de Vigo.
¿Y el refuerzo de la calle Coruña? No hay que olvidar que hasta mediados de 2018 Vigo contará con cuatro salas civiles especializadas en Familia. Desde principios de año, este tribunal de apoyo ya no recibe asuntos nuevos pero sí seguirá hasta junio para tramitar todos sus pleitos atrasados y celebrar los juicios que ya tiene señalados. Las adopciones de menores tutelados, procedimiento del que se encargaba este refuerzo, pasarán a formar parte de un reparto normal entre las tres salas definitivas.
Ayer se produjo la primera toma de contacto del personal judicial, juez, letrada de la Administración de Justicia (quien también ostenta el mismo cargo en otro juzgado civil de Vigo a la espera de la asignación de una plaza definitiva) y funcionarios en las instalaciones de la Gota de Leche, donde se realizaron los últimos retoques de pintura y cableado para que hoy entre en funcionamiento sin más dilación. La creación de esta sala, en palabras de López, resulta "imprescindible" por los altos índices de trabajo en las otras salas aunque gracias al refuerzo pudo aliviarse parcialmente". "Para mañana (por hoy), esperamos un mínimo de 10 demandas pero estamos preparados. Las instalaciones son inmejorables", señala el juez, quien lamenta la distancia con el grueso judicial sito en calle Lalín. "Sería conveniente estar junto a las otras salas, fiscales de Familia, forenses y equipos psicosociales", contempla el magistrado.
