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Medidas para mejorar la regulación del tráfico

El tráfico en García Barbón, Gregorio Espino y plaza del Bicentenario se regulará con "turboglorietas"

Transformará en febrero la que regula la intersección con Rosalía de Castro y Miragalla, estudia la de Gregorio Espino y ultima la del Bicentenario -Hay ya más de una decena hechas o diseñadas de las 60 del casco urbano

Simón Espinosa

Las rotondas tradicionales pasarán poco a poco a la historia en Vigo. Desde 2015, cuando se instaló la primera "turboglorieta" en el cruce de Gran Vía con Islas Baleares, ya se han transformado ocho. Lo que comenzó como un modelo en fase de pruebas para tratar de reducir la elevada siniestralidad en las originales (su mal uso por parte de los conductores era la segunda causa de accidente en Vigo) y también para mejorar la fluidez del la circulación, se ha convertido en una solución definitiva para la Concejalía de Tráfico. El éxito -aseguran- ha sido de tal magnitud que el Concello ha tomado la decisión de replicar este modelo en todas las rotondas de la ciudad. Solo en el casco urbano rondan el medio centenar. "Esa es la idea. Se analizará una a una por si hubiera alguna complejidad técnica que lo impidiera en algún caso, pero el planteamiento es convertir todas porque están dando muy buenos resultados", aseguran fuentes municipales. En el casco urbano se contabilizan unas 60.

La apuesta es total. Tanto, que la semana pasada se habilitó la de Eduardo Cabello, en Bouzas, y en los próximos días se hará lo mismo con la que será por ahora la más céntrica: la ubicada en la confluencia de las calles García Barbón, Rosalía de Castro y Miragalla (junto al edificio de la Metalúrgica). Casi 20.000 vehículos diarios la atraviesan en jornadas laborables. Pero el trabajo continuará en otras zonas en cuestión de semanas. Los técnicos tienen ya hecho el diseño de la del Bicentenario, trabajan desde hace meses en la de Isaac Peral, de mayor complejidad, y tienen en cartera otras muchas como las de Travesía de Vigo o Gregorio Espino.

La nueva "turboglorieta" de García Barbón será similar al resto de rotondas transformadas en Vigo, aunque con alguna característica particular. Uno de los principales cambios para los conductores que permitirá dar mayor fluidez a este importante eje urbano se ejecutará en dirección a Isaac Peral. El carril bus se mantendrá, como ahora, al margen de la glorieta. Es decir, los autocares pueden seguir de frente sin necesidad de frenar. Esto mismo podrán hacer todos los pilotos que circulen por el carril derecho contiguo al del servicio público. Por él solo se podrá seguir hacia Teis. El izquierdo se reserva para aquellos que quieran seguir también en esa dirección (en este caso sí tendrán que respetar un ceda el paso) y para los que vayan hacia Areal por Miragalla, Rosalía de Castro o deseen realizar un cambio de sentido.

En dirección contraria, el carril derecho será el único válido para poder salir hacia Miragalla y Rosalía de Castro. También se podrá utilizar para seguir de frente por García Barbón. Para continuar por esta última calle se podrá además entrar a la "turboglorieta" por el izquierdo, que estará habilitado también en exclusiva para los conductores que tengan que realizar un cambio de sentido.

Finalmente, los pilotos que lleguen a esta nueva "turboglorieta" desde Rosalía de Castro deberán saber que por el carril derecho solo podrán acceder a García Barbón en sentido centro. Será el único movimiento posible. Para el resto (ir hacia Isaac Peral, Miragalla o regresar a Rosalía) se reserva el izquierdo.

Como adelantó este periódico, en solo un año y con las "turboglorietas" en marcha de Gran Vía, Castelao, Avenida de Europa, Castrelos, Samil y Travesía de Vigo con Jenaro de la Fuente, hubo 102 accidentes menos en rotondas que en el ejercicio anterior. Fue en 2016. Además, el mal uso de las glorietas por parte de los conductores pasó de ser la segunda a la tercera causa de accidente en Vigo. En el primer semestre de 2017 era ya la sexta. Según datos municipales, en algunas el número de golpes disminuyo hasta en un 75%. Además, acabaron con el conocido como timo de los "rotonderos", que simulaban accidentes para cobrar indemnizaciones.

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