Seis meses de cárcel. Es la pena que aceptó ayer en la Audiencia viguesa una mujer que falseó el origen de 20.000 euros recibidos como regalos de boda para no compartirlos con su exmarido tras el divorcio. La mujer asumió la autoría de un delito de falsificación de documento privado en concurso con otro intentado de estafa procesal.

Según la Fiscalía, la acusada, V.P.M., recibió en 2006 un total de 20.000 euros como préstamo por parte de un hombre -que consta en el escrito como coacusado pero que ayer no estaba en la vista-, concretando que el pago de esa deuda se produjo en septiembre de 2009. Meses antes, en julio, la mujer se casó, pero tras el divorcio, en 2011, su exmarido instó la liquidación de la sociedad de gananciales, interesando que se atribuyese a esos 20.000 euros carácter ganancial ya que, alegó, tenían su origen en regalos de boda y se habían destinado al pago de una deuda privativa.

Según la fiscal, para intentar que el juez diese al dinero carácter privativo, la mujer y el otro acusado hicieron una nueva escritura de pago para simular, mediante recibos falsos, que ella había abonado el crédito en fechas anteriores a su boda. La Audiencia declara ahora nula esa escritura pública con reserva de acciones civiles para al afectado.