Aunque el gobierno local ha ido poco a poco haciendo que los adoquines pasen a la historia en Vigo mediante los planes masivos de humanizaciones, todavía quedan más de diez calles en las que pervive este molesto y problemático pavimento. Buena parte son las de la oleada de viales reformados hace más de una década con motivo de la Volvo Ocean Race: Carral, Marqués de Valladares, Reconquista, Velázquez Moreno o Luis Taboada. Todas ellas, al igual que García Olloqui y Plaza de Compostela, presentan deficiencias similares. Pero no son las únicas: Atalaia, Amor Ruibal, López de Neira, Travesía de Marqués de Alcedo, Churruca, Rogelio Abalde o Victoria también continúan siendo adoquinadas.
El Ayuntamiento sufre también esta problemática, ya que le obliga a realizar reparaciones cada poco tiempo con inversiones millonarias. Por ello, ya aprovechó la humanización de muchos viales para eliminar el adoquín. Es el caso, por ejemplo, de las céntricas María Berdiales, Manuel Núñez o Doctor Cadaval.
