El Cristo de la Victoria ya reposa en la carroza con la que recorrerá hoy las calles de Vigo arropado por miles de fieles. Muchos de estos devotos no han querido esperar a este paseo con el Santo para renovar su devoción y no dudaron en asistir al emocionante y solemne descendimiento de la talla.

Tras las palabras del delegado episcopal de Cáritas en España, Vicente Altaba y la solemne y cantada eucaristía que daba por concluidos los nueve días de honores al Cristo, cientos de feligreses fueron testigos del primer acercamiento del año a la imagen.

Ante una Concatedral completamente abarrotada-exteriores incluidos al estar colocada una pantalla gigante- los veinte costaleros entraron portando el carro que paseará esta tarde la imagen del Santo y despertando el aplauso de los cientos de vigueses que no dejaban de corear elogios a su patrón. "¡Viva el Cristo de la Victoria!", decían, "¡Viva!" , respondían todos al unísono mientras más de una persona, se secaba las lágrimas de ver tan cerca el instante del descendimiento.

Pablo Brasa, dos años como costalero

"Cuadro mis dos trabajos en Madrid por el Cristo

Los costaleros y cofrades, armados con dos grandes escaleras se situaron junto a la talla, de más de 70 kilos de peso. Anclaron la cima de la cruz y la bajaron con sumo cuidado, propiciando nuevamente un aluvión de vítores y palabras de agradecimiento al Santo. "El Cristo de la Victoria es más símbolo de Vigo que el propio mar", recordaban, emocionados, algunos asistentes. Una vez la imagen reposaba en los brazos de sus costaleros, dos reclinatorios colocados junto al Altar Mayor se convirtieron en el nuevo 'descanso' del Cristo.

José Fernández, 47 años como cofrade

"El Santo me devolvió una hija que estaba enferma

Los fieles se agolpaban por ser los primeros en presentarle sus ofrendas a modo de besos, caricias o pañuelos que posteriormente frotaban contra sus dolores. "Nos llevamos un poquito del alma del Cristo", recitaban.

Los cariños a la imagen se prolongaron hasta casi las 23.00 horas de la noche. Una vez la Colegiata se vació de fieles, los cofrades que mañana empujarán el carro (16 en su interior, 4 en el exterior y uno dirigiendo) colocaron ya la talla encima del mismo para tener todo preparado de cara a la procesión, que arranca desde la calle Real a las 19.30 horas. La imagen del Cristo no se colocará encima del Altar a su regreso, sino que estará expuesta al alcance de los fieles hasta el próximo jueves.

Victorino Comesaña, 40 años como costalero

"Vigo no se entendería sin esta procesión

Los actos de hoy dan comienzo a las 11.00 horas con una misa oficiada por el obispo Luis Quintero Fiuza y proseguirán pasada la media tarde con la procesión por el centro de Vigo.