El octogenario que hace apenas diez días se autolesionó con un cuchillo y amenazó con suicidarse en una entidad bancaria de Vigo, por un problema con el seguro que había contratado para su vivienda, falleció ayer al precipitarse al mar con su vehículo en una de los pantalanes de Beiramar. El rescate del cadáver de este hombre de 81 años de edad, F.J.C.B., que residía en una calle muy próxima tanto de esa zona portuaria como del banco donde la mañana del pasado 26 de abril había protagonizado el violento incidente, movilizó a un amplio dispositivo de emergencias y resultó complejo ya que el coche cayó en una zona profunda situada a más de 15 metros del muelle.

La alerta se recibía en torno a las diez y media de la mañana. El turismo se precipitó al agua en la dársena 3 de Beiramar. Marineros de un barco portugués amarrado en el lugar observaron el siniestro. Al menos un testigo relató que vio al coche dar una vuelta y a continuación acelerar y dirigirse velozmente hacia el mar. El turismo, describieron los bomberos, cayó a una distancia de entre 15 y 20 metros del muelle, a una profundidad de unos 11 metros. Entre los primeros en llegar al lugar se encontraron agentes del grupo GOA de la Policía Local y pronto se personaron los demás servicios de emergencia que intervinieron en el operativo en tierra y mar: bomberos -entre ellos los cuatro buzos que se sumergieron en el agua-, Policía Nacional, Policía Portuaria, sanitarios del 061, Protección Civil, Salvamento Marítimo y Guardia Civil, cuerpo este último que asumió las diligencias del caso.

La prioridad del operativo fue comprobar, como se sospechaba, si había alguien en el interior del coche. Dos de los buzos de los bomberos se sumergieron. La labor fue compleja porque las aguas estaban muy turbias, pero finalmente lograron localizar el vehículo -la zona se señalizó con una boya- y rescatar el cuerpo del conductor, que fue trasladado por una patrullera de la Guardia Civil hasta la zona portuaria de O Berbés para proceder al levantamiento del cadáver. Un forense realizó el examen al cuerpo, que después fue trasladado al Hospital Nicolás Peña para la autopsia. Otra pareja de buceadores descendió de nuevo para verificar que no había ninguna persona más dentro del turismo.

Incidente por un seguro

El fallecido es el hombre de 81 años que la pasada semana había entrado en la sucursal de Abanca ubicada en la confluencia de la plaza de Eugenio Fadrique con la calle Coruña armado con un cuchillo con el que amenazó con suicidarse si no le daban una solución a un problema. Según se quejaba, la aseguradora que había contratado en el banco no quería hacerse cargo del arreglo de unas humedades que habían aparecido en su piso. Al menos hasta ese día el seguro sostenía que dar solución a esto competía a la compañía de la comunidad de vecinos del edificio.

Ese día el anciano llegó a causarse a sí mismo varios cortes en el abdomen y otro en el cuello, todos leves. El director de la oficina bancaria sufrió una lesión profunda en un dedo al intentar arrebatar el cuchillo al cliente para evitar que se hiciese daño. Agentes de los GOA que estaban en las cercanías irrumpieron en la sucursal al ser alertados por un testigo, consiguiendo, tras dialogar con el anciano, quitarle el arma. El octogenario, que estaba muy nervioso, fue trasladado en una ambulancia al Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo. El directivo bancario también fue evacuado, en su caso al Hospital Povisa, si bien recibió el alta ese mismo día al ser la lesión en la mano menos grave de lo que inicialmente aparentaba.