Un menor de 16 años fue detenido el pasado miércoles en su propio domicilio por un supuesto delito de violencia en el ámbito familiar, tras empujar, amenazar e insultar a su madre y a su padrastro supuestamente por no haberle regalado un teléfono móvil.

Los hechos tuvieron lugar en la tarde de Reyes, en un domicilio de la calle Pi y Margall, según informan fuentes policiales. Un vecino del edificio llamó a la Policía al escuchar gritos y golpes procedentes de uno de los pisos. Cuando llegaron los agentes, la misma persona que dio el aviso de alarma les confirmó que no era la primera vez que se escuchaban discusiones en ese piso.

Cuando los policías llamaron a la puerta, les abrió la puerta la madre de familia que, en estado muy nervioso y entre sollozos, les permitió entrar al domicilio. Allí, los agentes comprobaron que había enseres tirados por la casa, varios cuadros rotos y un joven con el torso desnudo, muy alterado, gritando y golpeando las paredes.

La mujer explicó a los policías que había iniciado una discusión con su hijo porque éste le reprochó que no le hubieran regalado un teléfono móvil. Cuando la madre y su pareja le dijeron que no tenían medios económicos para hacerle ese regalo, el chico se puso agresivo, comenzó a romper cosas y llegó a empujar a la pareja.

La señora también explicó que el menor les exige dinero "constantemente" y que las discusiones son frecuentes. También confesó a los agentes que tiene "miedo" del menor, que ya estuvo ingresado en un centro hace dos años por su carácter conflictivo. Ante estos hechos, los agentes procedieron a la detención del joven.