La institución mantiene la estabilidad desde 2012, cuando consiguió eliminar el déficit, no tiene deudas bancarias y hace frente a los pagos en los plazos legales. Aunque la aportación de la Xunta crece ligeramente dentro del nuevo plan de financiación 2016-20, Vigo no está satisfecha con la medición de resultados, pues en 2016 supondrá un reparto del 14% del total de fondos frente al 33% del último ejercicio. Aun así, asume que puede ayudar a "salvar las dificultades financieras" de Santiago y A Coruña.
La Universidad prevé convocar un número mayor de plazas, puesto que los presupuestos de la Xunta contemplan una tasa de reposición del 100% de catedráticos y profesores titulares.
A las becas y ayudas propias, Vigo añadirá en 2016 las destinadas a profesores y estudiantes refugiados. Y potenciará el empleo y el emprendimiento con acciones formativas para estudiantes, una segunda fase del concurso Incuvi, que ayudará a consolidar los proyectos ganadores en otras ediciones, y una feria conjunta con la Universidad de Oporto que se celebrará en noviembre en Vigo y en la ciudad lusa.
La especialización de los campus y la internacionalización serán otras líneas estratégicas de los presupuestos.
Elección del defensor
Las cuentas serán presentadas en el Claustro del próximo lunes, donde el rector Mato también leerá su informe anual y se celebrará la votación para elegir al defensor universitario. El catedrático Argimiro Rojo, que ostenta el cargo desde julio 2011 y agota mandato, es por ahora el único candidato.
