La tigresa 'Duches' no ha superado el cáncer de piel que padecía desde hace casi un año. Ayer le fue practicada la eutanasia después de que el equipo técnico de VigoZoo valorara su situación como "irreversible".

Hace tres meses la felina fue intervenida en el Hospital Veterinario Universitario Rof Codina, en Lugo, para extirparle un tumor en la piel. No era el primero, los sufrió en el lomo y en dos de sus patas. Entonces, los veterinarios ya advertía de que su situación era muy delicada y de que las siguientes semanas serían decisivas.

Su proceso de recuperación no estuvo exento de complicaciones, llegó a arrancarse los puntos de las heridas realizadas durante la intervención. Eso pospuso su tratamiento con quimioterapia, recibido en el propio centro, y que no logró detener su debilitamiento con el paso de los días. Tras varios meses de incertidumbre, el equipo responsable concluyó ayer con su vida para "evitarle sufrimientos innecesarios al animal".

En el último mes y medio la felina había comenzado a perder peso hasta dejar de alimentarse completamente en los últimos 10 días. La tigresa ya había mostrado problemas con la comida previamente, ya que no era capaz de asimilarla. A pesar de que comía más kilos de los que le correspondían, no conseguía engordar. Antes de su muerte llegó a pesar una tercera parte del peso que le correspondería, unos 200 kilos.

Tras su muerte se le realizó una exploración en la que se le encontró una úlcera gástrica, que está siendo analizada para determinar su causa. El veterinario Antonio Acuña, responsable de la salud de los animales del recinto, ya apuntó la posibilidad de que surgiese este inconveniente tras la operación.

Duches, que tenía 15 años, llegó al zoo, proveniente de un circo, hace ocho años. El cáncer es una enfermedad muy poco habitual en los animales salvajes, más acostumbrados a padecer males provocados por parásitos. Pero los animales que nacen en cautividad, fruto de mezclas entre especies son más propensos a desarrollar estas dolencias.

El suyo ha sido el primer caso de cáncer de piel al que se ha enfrentado el recinto de Vigo, lamentablemente con un triste final. No existe un tratamiento específico para animales con cáncer. A falta de investigaciones específicas, se utilizan los mismo fármacos que con los humanos, sin conocerse qué nivel de eficacia tienen sobre ellos.