Los 500 asientos del Ifevi se quedaban cortos para albergar al público de sus festivales. Casi 200 personas se agolpaban de pie en los pasillos. Este año tendrán asiento. La Asociación de Corales Polifónicas de Vigo (Acopovi) traslada sus principales certámenes, el de Habaneras y el de As Letras Galegas, al Mar de Vigo, con sus 1.400 butacas. Las formaciones vocales ocuparán su escenario casi todos los domingos desde el 9 de marzo a principios de junio. También se les hizo pequeño ayer el aforo del Centro Cultural Novacaixagalicia para acoger el 4º Día de Acopovi, en el que presentó sus proyectos para 2014 y en el que actuaron 10 de sus 35 miembros.

La parte más emotiva de la gala llegó con la entrega de premios. El galardón a toda Una vida entregada al mundo coral lo recibió Clara Ferreira, una viguesa de 79 años, que comenzó a tocar la mandolina hace 70 alentada por su padre, fundador de la antigua Coral Airiños do Mar de Teis. "Yo creo que nací cantando", cuenta mientras recobra el sosiego, tras la sorpresa por el premio y la emoción que sobre el escenario solo le permitió articular una palabra: "Gracias". No solo lleva toda la vida participando en coros, si no que fundó uno junto a sus hermanos cuando, a punto de cumplir la mayoría de edad, emigró a Buenos Aires. Crearon la Coral Airiños de Vigo, con gran presencia de gente de Teis. Con un repertorio "siempre gallego" recorrieron radios y televisiones y grabaron discos con un sello norteamericano, RCA Victor. "¡Formamos un buen follón!", recuerda. Desde su vuelta a Vigo, en los 60, siempre ha cantado en corales de Teis. Ahora integra la de su asociación vecinal y, con su envidiable vitalidad, no se pierde ni un ensayo. "Tengo que estar muy mal para no ir", relata y explica que es muy raro que le pase: "Creo que he ido tres días al médico en toda mi vida". Sus compañeros la definen como ejemplo de buen hacer, respeto, bondad, compañerismo, dedicación, compromiso y fidelidad.

El premio al Apoyo a las corales de Vigo lo recibió la Concejalía de Cultura por su colaboración "firme e incondicional", en concreto, con un convenio para 105 actuaciones por toda la ciudad. Lo recogió su titular, Cayetano Rodríguez, en su primera aparición tras atravesar una larga enfermedad. El edil puso a Acopovi como "ejemplo de compromiso con la cultura y con la vertebración social". El alcalde, Abel Caballero, también se dirigió a los miembros de la asociación: "Hacéis posible que la música esté a la vuelta de cada esquina porque la lleváis dentro".