El túnel de Beiramar cuenta desde esta semana con un nuevo sistema "inteligente" de cámaras de seguridad. Esycsa, la concesionaria encargada de su mantenimiento, culminó ayer la renovación de las instalaciones del subterráneo en las que lleva trabajando más de un mes y que obligó a cortar parcialementeel tráfico en el subterráneo durante más de cinco horas hasta en 20 ocasiones en los últimos 30 días.

Aunque se cambiaron prácticamente todas las instalaciones eléctricas del túnel, la más importante ha sido la de dotarlo de cámaras que incorporan la funcionalidad de Detección Automática de Incidentes. Este software permite que cualquier incidencia que ocurra en el interior, como humo, accidentes, presencia de peatones, animales u objetos, o simplemente congestión de vehóculos, sea notificada en tiempo real al centro de control de la Policía Local. El sistema alerta automáticamente de todo ello y permite que agentes, bomberos o servicios sanitarios puedan movilizarse con mayor rapidez.

La concesionaria instaló también cuatro paneles electrónicos en ambas entradas del subterráneo que avisan a los conductores de la velocidad a la que están entrando en el túnel (el límite es de 50 km/h). Además de incrementar seguridad, el Concello persigue reducir el número de infracciones. En el interior hay tres cabinas en las que se coloca el radar indistintamente.