La magistrada María del Carmen García Campos acaba de ser designada presidenta de la Junta Electoral de Zona de Vigo, que velará por la legalidad en los comicios municipales del 22 de mayo tanto de la ciudad olívica como de los concellos del Val Miñor y Redondela. Titular de un Juzgado de Primera Instancia, compatibilizará esta labor con la electoral.

-Estas elecciones llegan con la novedad de la prohibición legal de las inauguraciones, ya en vigor desde el pasado martes.

-La reforma introducida en la Ley Orgánica de Régimen Electoral General aplica por primera vez un criterio temporal. Prohíbe las inauguraciones de servicios y obras y las campañas institucionales llevadas a cabo por poderes públicos para resaltar logros desde la convocatoria de las elecciones hasta el propio día de la votación. Es la novedad más destacable e introduce un criterio de seguridad, porque ayudará a resolver las cuestiones que puedan presentarse. Antes había que valorar la naturaleza del acto: si era oportunista o era por ejemplo de una obra que por su devenir procedía en ese momento su inauguración. Ahora está claro. La ley detalla lo que no se puede hacer.

- ¿Estará la Junta especialmente vigilante al respecto?

-La Junta no actúa de oficio. Debe haber quejas, denuncias o reclamaciones, lo dice la ley. Y entiendo que tiene que ser así: contribuye a la imparcialidad de la actuación de la Junta. Si toma la iniciativa, en función de que afectase a un partido u otro afectaría a esa imparcialidad.

-La prohibición se aplica cuando aún faltan casi dos meses para los comicios. ¿Esperan un aluvión de quejas?, ¿habrá supuestos difíciles de valorar?

-La ley es clara, detalla lo que se puede hacer y lo que no. Es de esperar que esto redunde en menor conflictividad y en menos quejas, sería la lógica. Aunque no se puede descartar que haya quien juegue con cierto margen interpretativo: puede haber supuestos difíciles y para eso estamos los que formamos la junta, para valorarlo. Pero racionalmente no cabe duda de lo que es una inauguración. Era más factible que el aluvión de quejas se produjera antes, y las había, cuando se aprovechaba para hacer inauguraciones que en realidad eran actos electorales.

- Ya tiene experiencia: cuando fue juez decana en Tui presidió juntas en diversos comicios

-Supongo que esa experiencia ayudará a hacer más fácil el cometido, pero sin duda habrá situaciones novedosas. Vigo es un partido judicial muy amplio y eso, en principio, ya supone una mayor carga de trabajo. Lo que sí aprecié en anteriores comicios es que las municipales son las más reñidas, las más conflictivas.

- La falta de espacio en los juzgados condiciona la ubicación de la sede de la junta: en el “hall” de la sala de bodas.

- Efectivamente. Las instalaciones son reducidas y se están acondicionando. Pero para reunirnos o para el escrutinio contaremos con las salas de vistas.