Las réplicas virtuales de las aulas y laboratorios de la Universidad de Vigo ganan usuarios y asignaturas disponibles. Los responsables de la plataforma de docencia a través de internet calculan que durante este curso se superarán los tres millones de conexiones –1,6 por cuatrimestre– frente a los 2,6 millones del periodo 2008/09 y muy lejos de los 23.400 registrados en 2003, el año de su puesta en marcha.
Si en aquel momento el número de profesores inscritos era de 55 y las materias no alcanzaban las sesenta, en este curso están registrados 1.518 profesores que imparten virtualmente 2.228 asignaturas. "La Universidad tiene 8.545, pero sumando las de los grados y las carreras que se van a extinguir. Realmente se imparten unas cuatro mil y la mitad están en internet", destaca el responsable de la plataforma, Arturo Casar.
A través de su número de DNI o de pasaporte, en el caso de los alumnos extranjeros, todos los estudiantes tienen acceso a la parte virtual de sus asignaturas. A través del servicio, los estudiantes pueden enviar y recibir ejercicios corregidos, consultar tablones de notas y calendarios de exámenes, ver vídeos relacionados con la materia o realizar consultas al docente.
Desde 2006 hasta hoy, la plataforma ha registrado más de seis millones de accesos. Cada febrero, coincidiendo con los exámenes, las conexiones diarias se duplican. El récord está fijado en 2008, con 351.000 accesos mensuales.
Durante el resto del curso, el día de mayor actividad son los lunes y los de menos, los viernes. Además, los domingos siempre hay más conexiones que los sábados. A los universitarios les gusta conectarse de madrugada y el registro histórico suma 9.700 accesos entre las cuatro y las cinco horas.
La plataforma también ha llamado la atención de los internautas extranjeros y su portal de entrada suma más de mil clics desde Japón o 918 de rusos. Además es un referente en Latinoamérica. Sus responsables ya la han dado a conocer en Argentina y Chile y podrían viajar este año a Uruguay.
Las propuestas de los profesores para llevar a cabo nuevas ideas han impulsado cambios en este servicio basado en la plataforma Claroline de software libre. Vigo es una de las universidades fundadoras del Consorcio Claroline junto a Lovaina o Quebec. "Prácticamente se desarrolla una nueva versión por año. Ahora estamos en la 1.9", añade Casar.
La universidad viguesa utiliza además la plataforma Moodle, más avanzada y en la que sólo están incluidos el 2% de los contenidos totales, entre ellos, el curso de Información Técnica del Medicamento, que es íntegramente virtual. En el futuro se añadirá un tercer sistema desarrollado por el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT).
