El Consejo de Ministros ratificó ayer la declaración de emergencia de las actuaciones hidrológico-forestales para paliar los daños causados por uno de los incendios que en octubre afectó a varios ayuntamientos de Pontevedra y arrasó con 8.877 hectáreas. El fuego se inició en Padróns (Ponteareas) y se extendió hacia el norte por Mos, Pazos de Borbén, Fornelos, Redondela, Soutomaior, Pontecaldelas y Cotobade.

El objetivo principal de esta actuación, que supone una inversión máxima de 1,5 millones de euros, es disminuir el aporte de cenizas y arrastres a los ríos.

Por el mismo importe el Consejo de Ministros también aprobó la declaración de emergencia para un incendio de Melón producido en octubre.

Por otro lado, el sindicato Comisiones Obreras criticó ayer la intención de la Consellería do Medio Rural de permitir a voluntarios extinguir incendios "en su fase final". Este sindicato advierte de la "nula eficacia" de este tipo de medidas por lo que reclama nuevamente a la Xunta un "gran pacto social" donde estén representados "todos" los agentes implicados.

El delegado del Gobierno en Galicia, Santiago Villanueva, y la unidad militar de emergencias (UME), dependiente del Ministerio de Defensa, han vuelto a rechazar la solicitud de comparecencia en la comisión de estudio sobre los incendios forestales de Galicia tras insistir el presidente del Parlamento gallego, Miguel Santalices.

Así lo indican mediante dos cartas remitidas con fecha de los pasados días 10 y 11 de abril. Villanueva le reitera a Santalices "la no procedencia de la comparecencia de cargos de la Administración General del Estado en las comisiones de los parlamentos autonómicos".