La propuesta de la Universidad de Santiago (USC) de reducir las plazas de Medicina para el próximo curso ha causado "extrañeza" en el colectivo médico ante el supuesto déficit de profesionales para los próximos años teniendo en cuenta las jubilaciones previstas. La propuesta inicial de la Facultad de Medicina es bajar de 360 a 342 las plazas, si bien la cifra definitiva que se ofertará el próximo curso no está cerrada: ha de debatirse en el Consejo para la Coordinación de la Docencia Clínica, compuesto por el Sergas, la Consellería de Educación, las universidades y representantes de los hospitales, que se reunirá el próximo 11 de abril.
En los últimos años las plazas se redujeron, de las 400 en primera matrícula en el año 2010 se pasó a 380 y después a 360. En este caso la facultad compostelana quiere recortar 18 más.
En las últimas semanas se han presentado varias propuestas de cara a prever las próximas jubilaciones y tener médicos suficientes: desde ampliar la edad de jubilación hasta los 68 años, a la contratación de médicos extranjeros o ofrecer contratos de uno o dos años a los MIR que terminen, en principio, en Atención Primaria o Pediatría. Facultativos consultados coinciden en la "exquisita formación de los médicos que salen de nuestras facultades". "Aquí son seis años de carrera y después pasan un examen MIR y, acto seguido, realizan la especialización en hospital, entre cuatro y cinco años. Son médicos muy bien formados. En otros países, depende en cuál, son menos de seis años de carrera, y muchos sin especialidad", explica Roberto Celi, facultativo de Atención Primaria y vocal del Colegio de Médicos de Pontevedra, que indica que en Atención Primaria hacen falta más MIR (formándose en dicha rama) para asegurar el relevo de las jubilaciones.
Para Elisa Ausín, especialista también de Primaria, uno de los problemas está en que, una vez que terminan la residencia, "no se quedan todos y los que se quedan están en unas condiciones complicadas, con consultas cada día en un sitio, sin poder tener una planificación familiar y sin derecho a vacaciones". Por ello, según la reflexión de esta facultativa, la propuesta de contratos de uno o dos años para los MIR en especialidades deficitarias, una vez que terminan la residencia o especialización, "es una noticia estupenda, al menos les da un margen de estabilidad durante un tiempo". La propuesta se percibe en el sector como una opción para quedarse en lugar de buscar trabajo en otro país después de todos los años de estudio. "Creo que es importante contar con un número de MIR suficiente y fidelizar a los que acaban", apunta la doctora.
En Atención Primaria los que terminan el MIR tienen más posibilidades de quedarse porque hay más déficit de facultativos, si bien hasta ahora no era una especialidad prioritaria para los que eligen plaza tras pasar el duro examen (las especialidades más demandadas son las hospitalarias).
Más médicos que plazas MIR
Para facultativos consultados, las plazas de la carrera de Medicina, sin dejar de ser importante para el futuro de la profesión, "no es lo más importante". "Tenemos un montón de médicos ya formados en España y hay muchas facultades con muchas plazas. Nosotros necesitamos más plazas MIR en Atención Primaria y que los que pasan el examen cojan estas plazas para poder especializarse", cuenta Celi.
Apunta que hay "una bolsa importante de médicos titulados que no consiguen una plaza MIR para especializarse". Este año, por ejemplo, se presentaron en España al examen 14.448 titulados en Medicina para 6.513 plazas en los hospitales y centros de salud (el reparto de plazas es nacional). Para los facultativos consultados se cuenta con médicos ya titulados que no consiguen realizar la especialización, obligatoria para ejercer.
