La manifestación de Vigo fue una de las más multitudinarias en años. Hasta 45.000 personas, según estimaciones de la Policía Local, abarrotaron el centro con consignas feministas sobre la igualdad de género, contra la violencia machista y por la equiparación salarial. No fue la única: en todas las ciudades gallegas se superaron las expectativas sobre participación, que fue mayoritariamente femenina pese a la presencia también de muchos hombres.
Los datos ofrecidos por las fuerzas de seguridad de estos municipios hablan de 33.000 manifestantes en A Coruña o 15.000 en Ourense. Son cifras que se alejan de las cerca de 50.000 en Vigo pero que, atendiendo al número de censados en cada municipios, las gallegas han salido a las calles con la misma energía.
En las principales ciudades, la participación es próxima al 15% de la población local. En otras palabras, por cada diez personas, casi dos salieron a la calle bajo una misma voz. El mapa muestra el porcentaje de gente que se manifestó durante el 8 de marzo comparado con la población local.
Una de las más importantes ha sido la celebrada ayer en Cangas. Las 3.000 personas que marcharon por un cambio radical en la sociedad son algo más del 11% del padrón, entre el que debe tenerse en cuenta las cientos de personas que se desplazaron a Vigo para participar en la más multitudinaria de Galicia. Las ciudades de Lugo y Ferrol no cuentan aún con datos finales sobre afluencia a las movilizaciones.
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Resultados de la encuesta de FARO
FARO publicó este 8 de marzo un especial sobre el Día de la Mujer en el que se recogían los testimonios de 6 gallegas. Sus experiencias desde el rural, la oficina, el desempleo o una pista de baloncesto, sirven como hilo conductor a las dificultades que se enfrentan las mujeres cada día para contar con las mismas oportunidades que un hombre. "Parece que debemos demostrar más para acceder al mismo cargo", confesaba la directora de la Autoridad Portuaria de Vigo, Cristina Colunga.
El reportaje contaba además con un formulario donde las lectoras del periódico podían relatar también su historia y responder a un breve test. En apenas 12 horas, un total de 55 personas respondieron a las tres preguntas.
La primera pregunta sobre las tareas del hogar, muestra que casi la mitad de las personas que participaron en el formulario son las encargadas de hacerlo "muchas veces". Un 23,6% asegura dedicarse a ello siempre, mientras que solo dos personas han respondido que nunca trabajan en casa.
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En la segunda cuestión, hasta un 62% reconoció haberse sentido discriminada por ser mujer. Sobre el 'techo de cristal', el símil sobre cómo las mujeres no logran acceder a determinados cargos por su condición, algo más de la mitad han dicho que lo han sufrido en su trabajo o en personas de su entorno. Un 41,8% niega haberlo visto y el 5,5% restante duda.
