El equipo de Luis Castedo Ribas, de Tecnología Electrónica y Comunicaciones (GTEC), con 22 investigadores, trabaja junto a profesionales de Alemania, Austria, USA y China en "tecnologías facilitadoras de comunicaciones inalámbricas".

Para Castedo Ribas lo más complicado es "trabajar a la vanguardia del conocimiento en un ámbito tan competitivo como lo es el de las comunicaciones inalámbricas". Explica que constituyen uno de los segmentos en donde se localizan los mayores desafíos del sector TIC. "La proliferación de terminales móviles (smartphones o tablets) ha provocado un aumento exponencial del tráfico a través de las redes inalámbricas, por lo que hay una necesidad indispensable de desarrollar nuevas interfaces radio que sean capaces de acomodar dicho tráfico", describe Castedo Ribas, hijo de Luis Castedo Expósito, catedrático de Química Orgánica y "catedrático ad honorem" en la Universidade de Santiago (en la foto, una imagen de Castedo Expósito con el holandés Ben Feringa, Nobel de Química, en una visita en el año 2000 a Galicia (Feringa recibió el galardón junto a Jean Pierre Sauvage y James Fraser Stoddart por el diseño y la síntesis de máquina moleculares).

Otro de los ámbitos de trabajo del equipo de Castedo Ribas, distinguido como Grupo de Referencia Competitiva, es el Internet de las cosas: la conectividad inalámbrica no solo de personas, sino de una amplia variedad de dispositivos, como sensores ambientales, cámaras de vídeo, micrófonos... que transmiten su información a través de enlaces inalámbricos, explica Ribas. Algunos de los retos del equipo son avanzar en investigación de interfaces radio, en redes inalámbricas de sensores y en radio definida por software. A Castedo, cuyo grupo se ubica en dos edificios distintos del campus coruñés de Elviña, le preocupa la captación de fondos suficientes para mantener la actividad y los salarios.