En Marea lanzó ayer una segunda campaña para darse a conocer tras los comicios del 25-S, de la que salió con 14 escaños, sin colmar sus expectativas, pero logrando su sorpassiño al PSdeG que lo sitúa como segunda fuerza por número de votos en la Cámara. Ahora, la gira del partido pretende apuntalar el proyecto y cohesionarlo, así como cimentar su expansión territorial y el liderazgo orgánico que Luís Villares, que ya realizó un periplo similar antes de ser designado candidato en agosto, asumirá en enero.

El partido instrumental nació en verano impulsado por Anova, las mareas locales y Esquerda Unida, que doblegaron la resistencia de Podemos a integrarse diluyendo sus siglas. Superado ese proceso, la hoja de ruta de En Marea pasa por un plenario el 17 de diciembre que establezca su cuadro orgánico, cuyos miembros serán elegidos por primarias en enero, aunque la elaboración del censo enfrenta a la mayoría de la formación con Podemos, partidaria de incluir a todos sus inscritos.

Villares será elegido entonces portavoz nacional, aunque tiene por delante la tarea de consolidar su liderazgo tras su reciente entrada en política. De hecho, señaló la falta de tiempo como un elemento determinante para no alcanzar la veintena de escaños esperada. Ayer inició una gira municipal para dar a conocer su proyecto y mantener un "pie en la calle", como anunció en el debate de investidura. Lugo fue el escenario para abrir el proceso "En Marea avanza".

"Queremos que todo el mundo sepa qué tipo de trabajo queremos hacer en el Parlamento, cómo queremos coordinar el trabajo en la base con el trabajo institucional y que el Parlamento sea un altavoz de un trabajo previo de transformación social", explicó el portavoz, acompañado de María José Bóveda, representante de la coordinadora provisional, y de los diputados Antón Sánchez, Ángeles Cuña y Carmen Santos, líder de Podemos Galicia.

Esta también consideró "muy positivo" el proceso de federación de Podemos Andalucía respecto a la dirección estatal morada. "Era una reclamación de parte de los territorios", indicó, que engloban el proyecto plurinacional "por el que apuesta Podemos". Lo considera un "paso previo" a la asamblea Vista Alegre 2 que renovará la dirección y posiciones del partido.