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Galicia modifica las vacunas infantiles y reduce los pinchazos antes de los 2 años

-Se suprime la inyección de los seis meses pero se protegerá de la polio a los 6 años -La comunidad seguirá en 2017 el modelo del Consejo Interterritorial de Sanidad

Un niño recibe una vacuna. // Efe / Villar López

La Comisión Galega de Enfermedades Inmunoprevibles ha dado ya su visto bueno a modificar el calendario de vacunación infantil de Galicia para 2017. Los cambios irán en la línea del modelo propuesto por el Consejo Interterritorial de Salud, como explica el vicepresidente de la Comisión Galega y subdirector de Información sobre Saúde e Epidemioloxía, Xurxo Hervada, quien avanza que lo que se busca es "simplificar". El principal cambio, como reseña el Ministerio de Sanidad a la hora de explicar la decisión adoptada hace ya más de un año con el propósito de que se aplique en todas las autonomías a partir del 1 de enero 2017, se refiere a rebajar el número de pinchazos en los menores de dos años, lo que reducirá, alega el Gobierno central, las "molestias" en los bebés y las visitas al centro sanitario que son necesarias para la vacunación.

El principal cambio afecta a la inyección frente a difteria, tétanos, tos ferina, poliomielitis, Haemophilus influenzae tipo b y hepatitis B. Hasta ahora, explica Hervada, se seguía una pauta de tres dosis el primer año y una de refuerzo a los 18 meses, combinando vacunas hexavalentes y pentavalentes. La nueva propuesta, "siguiendo un modelo que funciona bien y que protege igual", explica, será la de 2 más 1 y solo con hexavalentes. Es decir, se pondrán dos dosis en primovacunación (a los 2 y 4 meses, suprimiendo la de los 6) y la tercera a los 11 meses, como se decidió a nivel estatal y para no coincidir con los pinchazos la meningitis C y la triple vírica, que se ponen a los 12. Al año también se inmunizaba a los niños contra el neumococo y ahora se hará a los 11 meses, para que las inyecciones queden más repartidas.

El cambio en la pauta para la hexavalente de difteria, tétanos, tos ferina, polio, la haemophilus influenza tipo b y hepatitis B, que empezará a aplicarse en 2017 en los niños nacidos a partir del 1 de julio de este año (que recibirán la vacuna ya a los 11 meses y no a los 6) conlleva añadir una vacuna de refuerzo contra la polio a los 6 años, pero en la práctica no se aplicará hasta 2023, cuando los menores que sigan el nuevo patrón de pinchazos lleguen a esa edad. Entonces esos niños también recibirán, en lo que en principio será una vacuna combinada con la de la polio, según el plan del Ejecutivo central, una dosis de recuerdo frente a difteria, tétanos y tos ferina con antígenos de carga alta. La prevista hasta ahora a los 6 años contra esas dolencias era la dTpa, similar pero de carga débil, que Galicia aplazó por problemas de suministro el pasado año. Esta inyección se mantendrá en quienes recibieron el formato vigente hasta ahora de cuatro dosis.

Respecto a esa inyección, que protege de la tos ferina, Hervada explica que siguen los "problemas de suministro". Pero las vacunas están presupuestadas, dice, y en cuanto Sanidade disponga de ellas "se avisaría con tiempo y de forma reiterada y en muchos casos personalmente" a las familias para vacunar a los niños en los que se aplazó.

El otro gran cambio del calendario en Galicia para 2017 siguiendo el modelo del Consejo Interterritorial -que se inspira en la Asociación Española de Pediatría- es eliminar la dosis de la vacuna de la hepatitis B que se ponía a los recién nacidos para que la primera se reciba a los 2 meses con otros antígenos en la vacuna hexavalente. En vez de a los 0, 2 y 6 meses, se administrará a los 2, 4 y 11 meses. Sí se mantendrá en los recién nacidos de madre sin cribado (se desconoce si padece la dolencia) y se pondrá una dosis más inmunoglobulina HB a los de madre portadora.

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