Mes tras mes, más ganaderos echan el cierre a sus explotaciones al no poder asumir las deudas que no han hecho más que aumentar desde el inicio de la crisis y que se agravaron con la venta a pérdidas de cada litro que sale de sus granjas. Un año sin cuotas lácteas, que ha puesto una mayor producción en el mercado, ha tirado los precios y ha obligado a cientos de ganaderos a abandonar su trabajo. Entre enero y mayo, Galicia perdió un total de 222 productores de leche, lo que supone casi medio centenar cada mes y representa el 2,4% del sector lácteo en la comunidad.
Este balance lo dio ayer en comisión parlamentaria, la directora xeral de Gandaría, Belén do Campo, quien advirtió de que esa pérdida supone el 1,5% del volumen de producción láctea en Galicia. Do Campo quiso matizar que la pérdida es más acusada en las explotaciones de dimensión inferior, aquellas de menos de 100.000 litros anuales de leche, pues esta reducción afecta al 11% de los pequeños productores, pero en los "tramos superiores" de producción "no está pasando".
En respuesta a sendas preguntas del PSdeG y AGE sobre la crisis del sector lácteo en la comunidad gallega, la directora xeral de Gandaría se refirió también a la continua bajada de precios que se paga por la leche a los productores gallegos -más de 3.000 cobran por debajo del coste de producción, según advierten los sindicatos agrarios- para justificar que es una situación generalizada en Europa. Do Campo apuntó que la media del precio del litro de leche en la UE descendió cinco céntimos desde octubre a junio, mientras en España y Galicia se está "conteniendo ese precio". Ahora bien, los ganaderos gallegos perciben los precios más bajos de toda España y están entre los que menos cobran de toda la Unión.
