La Xunta, la Federación Galega de Municipios e Provincias y la Rede Galega de Loita contra a Pobreza acaban de firmar en Santiago la Axenda Social de Galicia, que les permitirá actuar de forma "coordinada" contra las situaciones de exclusión y pobreza. El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, destacó que la prioridad de las líneas de actuación serán las familias "que peor lo están pasando", que dispondrán de un interlocutor responsable de dar respuesta a sus necesidades de acuerdo con los contenidos establecidos en el protocolo. Se trata, explicó Feijóo, de "unir fuerzas en una hoja de ruta concreta" para luchar contra la exclusión. Este acuerdo se logra a cinco meses de las elecciones autonómicas y a uno de las generales.

Entre las medidas que desgranó el mandatario gallego se encuentran las de apoyo a las rentas, las de lucha contra la pobreza energética, de atención a la vivienda o de inclusión social. Entre ellas está que los concellos de las siete ciudades podrán complementar la ayuda de la Xunta del tícket eléctrico, que se pondrán a disposición de los municipios viviendas desocupadas para ponerlas en el mercado de alquiler o que se facilite una ayuda para el pago de medicamentos para las personas con ingresos por trabajo inferiores a los umbrales de la Risga, especialmente aquellas con menores al cargo.

En lo que respecta a la Xunta, se invertirán este año 162 millones de euros, tal y como había indicado el conselleiro de Política Social, José Manuel Rey Varela, en el Parlamento. Los concellos, que ahora deberán adherirse al acuerdo a título individual, también habilitarán un presupuesto. Con lo que sí contarán es con un refuerzo en sus plantillas de asistentes sociales, ya que el Ejecutivo gallego financiará medio centenar de plazas para atender a los ciudadanos en los concellos de más de 20.000 habitantes.

Antonio Hernández, presidente de la Rede Galega contra a Pobreza, se felicitó de la iniciativa por el hecho de que vaya dirigida especialmente a personas con carencias materiales graves. Por su parte, el presidente de la Fegamp, Alfredo García, aseguró que con la firma los concellos se comprometen a cumplir su parte. "A pesar de las dificultades y los recursos limitados con los que nos encontramos", señaló, "es nuestra responsabilidad y deber".