El número de usuarios de centros de día se desplomó un 23 por ciento el pasado año coincidiendo con el inicio de los recortes aplicados a la dependencia. De 1.871 personas que disfrutaban de este servicio en 2013 se bajó a 1.443, según recoge el Informe de Seguimiento del Plan Galego de Persoas Maiores que cada año elabora la Xunta. Es además la primera vez que desciende la demanda desde 2011. Esto sucede después de que en 2014 se iniciase el proceso de revisión de las ayudas a la dependencia tras introducirse nuevos criterios que derivaron en un aumento del copago para muchos de los beneficiarios y que ahora la Consellería de Política Social quiere revertir. Hay dependientes que pasaron, de hecho, de pagar 400 euros a tener que abonar el doble por una plaza y ante estos precios algunas familias se replantean mantener a sus mayores en estos centros de día.
Según el informe de la Xunta en el que se analiza el cumplimiento de las medidas recogidas en el Plan de Maiores, "las plazas públicas o financiadas con fondos públicos para atender a personas mayores en centros de día" se redujo "un 16 por ciento" en el último año. La Consellería de Política Social argumenta que este descenso se debe a "una cuestión metodológica" puesto que antes se computaban todas las plazas y en 2014 solo contabilizaron aquellas que están ocupadas. También cuestiona la reducción de "un 23 por ciento" en el número de usuarios y que consta en el informe que acaba de ser publicado y alude a "un cambio de criterio" en la contabilidad, aunque no aclara cúal habría sido en ese caso la evolución en la demanda en el último año.
En cualquier caso, el departamento de José Manuel Rey Varela deja claro que, aunque se hayan podido cerrar plazas en centros de día con pocos usuarios, se han abierto otras en localidades con más demanda. "La Xunta distribuye las plazas de modo estratégico. Cumplimos el compromiso de dar atención a todos aquellos mayores que lo necesiten y de cubrir la demanda de estos servicios al cien por cien", explican.
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Según el informe de seguimiento del Plan de Maiores, los centros de día son los servicios que más usuarios perdieron. En las residencias, sin embargo, se mantiene estable el número de mayores atendidos, con un ligero ascenso del 1,8 por ciento. En 2014 pasaron por los geriátricos de la Xunta 8.447 mayores (150 más que el año anterior).
La modalidad de alojamiento de personas mayores en viviendas comunitarias, sin embargo, sufre un fuerte descenso del 14 por ciento, aunque, en este caso, el número de usuarios es muy pequeño: solo 62 el pasado año.
Lo que aumenta, aunque ligeramente, es la atención domiciliaria. Los beneficiarios de la ayuda en el hogar suben a más de 12.000, un 2,6 por ciento más que el año anterior. También aumentan los usuarios de la teleasistencia en un 1 por ciento hasta los 5.517 mayores. Este dispositivo está especialmente pensado para personas que viven solas, la gran mayoría son mujeres de más de 60 años (4.407).
Además unos 347 ancianos han hecho ya uso del servicio de localizadores que ofrece la Xunta para evitar que puedan perderse.
Dentro de la atención domiciliaria, la única prestación que retrocede es el llamado "Xantar na Casa", aunque se trata de una reducción muy leve de solo el tres por ciento. De 1.244 personas atendidas se ha pasado a 1.210. Además cuatro concellos se han dado de baja de este programa, que había sido ideado por el gobierno bipartito, y solo Begonte, en Lugo, se ha incorporado para empezar a servir comidas a domicilio. Si en 2013 había 157 ayuntamientos adheridos, en 2014 esta cifra bajó a los 154.
La Xunta recuperará en 2016 las ayudas para eliminar barreras en el hogar que suprimió con la crisis
- La Consellería de Política Social retomará en 2016 la línea de ayudas para la promoción de la autonomía personal que estaban enfocadas a eliminar barreras arquitectónicas en el hogar y adaptar la vivienda de las personas mayores con movilidad reducida o discapacitados. Estas subvenciones fueron suprimidas durante la crisis, junto con las ayudas para la adquisición de prótesis dentales y audífonos.El Plan de Maiores 2010-2013 con horizonte 2015 contemplaba, en todo caso, mantener estas subvenciones pero la Xunta reconoce que no pudo cumplir con este objetivo "por razones presupuestarias".El departamento de José Manuel Rey Varela trabaja ya en la redacción del próximo Plan de Maiores y además confirma que va a convocar de nuevo las ayudas para la promoción de la autonomía personal.Según el informe de seguimiento del plan vigente, en 2014 se cumplieron el 82 por ciento de las medidas comprometidas, aunque este grado de ejecución es diferente según cada eje de actuación. Mientras lograron superar la barrera del 90 por ciento de iniciativas realizadas en materia de envejecimiento activo, participación social, promoción de valores y protección de derechos, el nivel de cumplimiento se rebajó al 76 por ciento en las medidas contempladas en el área de prestación de servicios.Entre las medidas que quedaron pendientes está la creación de un Banco de Voluntariado para que los mayores puedan apuntarse y ponerse a disposición de aquellas personas que necesiten voluntarios.También quedó en el cajón la propuesta de la Xunta de realizar un estudio estadístico sobre las personas mayores que viven solas y evaluar sus necesidades y la implantación de nuevos programas para atenderlos.
