El Plan de Racionalización de la Administración Pública puesto en marcha en 2010 bajo la dirección de Alfonso Rueda ha supuesto la eliminación de 59 fundaciones, consorcios, sociedades, ... coloquialmente todos conocidos como chiringuitos. Supone un tijeretazo del 37%, pero Galicia no lidera el esfuerzo por adelgazar la administración creada bajo la excusa de la búsqueda de mayor eficiencia pero que sobre todo permite relajar controles y huir los límites de la deuda y el déficit. Galicia es la sexta comunidad que aplica mayor ajuste, pues otras autonomías han sido más exigentes: Baleares ha suprimido en el mismo periodo, desde 2010, el 60,7%, Murcia el 55% y Valencia, el 40% por ejemplo.
Así sucede que si hace cuatro años, Galicia era la sexta autonomía con más chiringuitos, como otras regiones han sido más severas con el adelgazamiento de su administración paralela, la gallega ahora escala posiciones y pasa a ser la 4 comunidad con más chiringuitos: 99. Por encima se sitúan Cataluña con 354, Andalucía con 241 y Madrid con 193, según el último informe del Ministerio de Hacienda que evalúa los planes de reordenación de la administración paralela puestos en marcha en las diferentes autonomías. Es en la comparación, donde el plan estrella que periodicamente 'vende' el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, no luce tanto.
La Xunta ha eliminado chiringuitos, pero también ha creado desde 2010 catorce, según las estadísticas del Ministerio de Hacienda. Es el caso por ejemplo de la Axencia para a Modernización Tecnolóxica de Galicia, la Axencia Galega de Innovación o la Axencia Tributaria de Galicia.
El mismo documento del Gobierno central constata que además el ahorro económico del tijeretazo a los chiringuitos de la Xunta es el octavo mayor. El ahorro desde 2011 es de 19,8 millones de euros por la reducción de personal, un 1,04% del ahorro total conseguido en España, que supera los 1.910 millones de euros. Esta reducción del gasto es posible por el recorte de plantilla en 311 efectivos, el quinto mayor ajuste entre las autonomías. Madrid ahorra 862 millones, Valencia reduce gasto en 514 millonesy Castilla-La Mancha, en 308 millones. El ajuste de personal ha sido de 5.462 personas en todo el país.
La dimensión del ajuste en la administración paralela ha sido incluso cuestionado por el Consello de Contas en su último informe. Es más nóminal que real. Puede parecer importante que en 2010 había 158 chiringuitos y ahora 99, 59 menos, pero resulta que "el ahorro económico es de solo 20 millones de euros, un uno por ciento de todo lo que mueve el sector instrumental". Dicho de otro modo, "la importancia de un gran número de entidades extinguidas es menor". ¿Por qué? Porque hay entidades ya desaparecidas que no tenían actividad y solo existían en los papeles, o si la tenían era ínfima. Por ejemplo, el consorcio que organizó la salida de la vuelta al mundo a vela en 2005 se extinguió siete años después.
El órgano fiscalizador del sector público en Galicia pone más peros al plan de adelgazamiento coordinado por Rueda. Pide a la Vicepresidencia de la Xunta más transparencia pues este departamento no hace públicos los informes de seguimiento del programa, y así no se sabe "el origen y composición de los ahorros", "ni el destino del patrimonio de las entidades disueltas", ni "las soluciones adoptadas en relación al personal". Se queja de que la única información es la de las notas de prensa.
La Xunta, que prevé continuar con el plan de racionalización y que a finales de 2015 haya 85 entidades en la órbita de la Administración paralela, también ha acometido recortes en los entes no eliminados, igual que en el resto de la Administración pública, para ahorrar en gastos corrientes.
