"Responsabilidad" y "diálogo" fueron las palabras más repetidas ayer entre los representantes de las instituciones pontevedresas y los líderes de los partidos al valorar la negociación abierta entre la comunidad de Montes de Salcedo y Defensa para fijar un canon anual que deberá abonar el Ministerio por la cesión de los terrenos sobre los que se levanta la base de la Brilat.

Todos los grupos políticos admitieron la importancia de la Brigada para el municipio, sobre todo en el aspecto económico, con un impacto sobre la comarca de unos 40 millones al año. Por ello, la apuesta y el deseo de que siga en su actual emplazamiento de Figueirido es unánime. Lo mismo ocurre con el presidente de la Diputación. Sin embargo, sí aparecen matices a la hora de calibrar las advertencias realizadas desde el Ministerio de Defensa de que la Brilat podría dejar su actual emplazamiento de no llegar a un acuerdo con los comuneros de Salcedo para la cesión de los terrenos. Una posibilidad que nadie se quiere plantear siquiera en la capital pero que cada vez es más real dada la magnitud de las diferencias entre vecinos y Ministerio en lo que respecta a la cuantía económica del canon -los primeros demandan 880.000 euros y el segundo ofrece 70.000-. Posturas que, actualmente, son "inasumibles" por ambas partes.

Por ejemplo, desde el BNG, grupo mayoritario en el gobierno coaligado de Pontevedra, evitan aún encender la alarma. El alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores, afirmó ayer que no alberga dudas sobre la permanencia de la Brilat en Pontevedra. "Todos somos sensatos. La negociación acaba de empezar y no está rota", señaló. "El actual momento es normal en cualquier negociación", dice, para añadir que "ambas partes llegarán a acuerdo razonable ya que es normal que los vecinos reciban una compensación por el uso de sus propiedades".

Para su socio de gobierno, el PSOE, ambas partes deben flexibilizar sus posturas para buscar un acuerdo. El teniente de alcalde de Pontevedra y portavoz del grupo de socialista en el Concello, AntónLouro, manifestó su "apoyo total a la continuidad de la Brilat en Pontevedra". Apeló al "diálogo" para resolver el conflicto y señaló que la cantidad que piden los comuneros "hay que entender que puede ser mucho para Defensa, así como que el Ministerio también puede ofertar otra cantidad" más elevada. Louro explica que "la Brilat es una prioridad para Pontevedra y su comarca" ya que "significa 2.500 puestos de trabajo", que generan, afirma, "un movimiento económico de más de 40 millones de euros".

La voz más preocupada por la falta de entendimiento entre Defensa y vecinos es la del PP. Tanto Jacobo Moreira, portavoz local, como el presidente de la Diputación, Rafael Louzán, ven lógico pagar un canon a los vecinos pero alertaron de que el distanciamiento actual parece "insalvable" por lo que llamaron a la "responsabilidad". Moreira apeló a la intervención del regidor para intentar buscar un acuerdo con la que califica de "principal empresa de Pontevedra" y Louzán culpó indirectamente de la problemática al gobierno local: "Situaciones como esta solo pasan en Pontevedra". "Es inaudito que algunos se unan para intentar expulsar a los que generan empleo y riqueza y actividad económica", añadió el máximo responsable de la Diputación.