Peritos del Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (Cedex), dependiente del Ministerio de Fomento, consideran "muy baja" la probabilidad de que "olas extremas" fuesen las responsables del hundimiento del Prestige en noviembre de 2002, en contra de la teoría del capitán del buque, Apostolos Mangouras, la naviera y expertos propuestas por la defensa.,

Durante su declaración en el juicio, los expertos de Fomento rechazaron ayer que las olas el día del accidente alcanzaran los 16 metros y aseguraron que el informe de un físico de Estados Unidos que sostenía su existencia ese día "se basa en una simulación y carece de datos reales".

La responsable del sector de Clima Marítimo del Cedex, María Jesús Martín, declaró que momentos antes del siniestro las estadísticas recogidas en las boyas instaladas en zonas como cabo Silleiro registraron una inclinación de olas "destacada". Pero considera muy poco probable que hubiese alguna de más de 15 metros. El director de I+D+i del Cedex, Antonio Lechuga, aseguró que se registran apenas una decena de olas extremas al año en todo el mundo.