Las postales que los turistas adquieren como recuerdo de Loviisa, una encantadora población costera a una hora de Helsinki, son fruto de la imaginación de una viguesa. Hace cinco años cambió su ciudad natal y un empleo que le encantaba en el área de logística de una naviera por una nueva vida en Finlandia que le reservaba sorpresas. Inspirada por el paisaje y el carácter bohemio de la localidad, donde residen un gran número de artistas, la creatividad de Ruth Landesa (Vigo, 1969) acabó por emerger. Su camino "de hormiguita" empezó con el diseño de joyas, creó un blog (El ala norte) para mostrarlas y plasmar sus ideas y dibujos y desde hace menos de un año trabaja como ilustradora profesional con una cartera de pedidos que incluye desde logotipos y diseño de páginas web a ilustraciones para varias publicaciones.
"No puedo decir cómo empecé, pero me engancha, me apasiona y cada trabajo es un reto. En mi círculo más próximo hay diseñadores gráficos, fotógrafos, músicos... Loviisa tiene una concentración fenomenal de gente relacionada con la cultura que resulta inspiradora y una muy buena amiga artista me animó. En España quizá no pasaría, pero aquí, aunque no tengas formación, puedes dedicarte a algo si el resultado es profesional", destaca.
El marido de Ruth, un ingeniero finlandés, y su familia viguesa siempre la han alentado. A sus dos hijos pequeños les divierten los personajes que crea porque transmiten simpatía y optimismo como reflejo del entorno cotidiano: "Esta pequeña ciudad es muy especial. Toda la gente levanta la mano para saludarte cuando pasas por delante de su casa. Eso te hace feliz cada mañana. Y creo que mis ilustraciones sonríen además por una necesidad interna. Aquí el tiempo es muy duro, en invierno llegamos a los 30 grados bajo cero, y a veces pasas tiempo sin ver a nadie".
El impresionante paisaje y las costumbres finlandesas también empapan sus creaciones: "Para una española, todo es muy curioso. Si miro por la ventana veo el mar congelado y agujeros para pescar. Y la gente va en trineo por la calle. Es un lugar extraordinariamente diferente y muchos profesionales liberales se trasladan aquí desde Helsinki para vivir de otra forma". En este sentido, destaca la habilidad de sus vecinos para los trabajos manuales y artesanales, muchos de ellos relacionados con una vida tradicionalmente ligada al entorno: "Persiste esa cultura de supervivencia, por eso respetan tanto la naturaleza".
Entre los últimos encargos de Ruth figuran la etiqueta para el café de una tienda delicatessen, el logo de un negocio de decoración y moda infantil de una emprendedora gallega en Suecia, la portada del anuario de la asociación española de investigación en literatura infantil y juvenil (ANILIJ) o la web del colectivo de profesores de español en Finlandia.
Sus ilustraciones han sido publicadas en dos revistas de la firma de comunicación Peak Press y el colegio bilingüe finés-español de Helsinki le encargó un gran póster sobre la tortilla de patatas.
Precisamente uno de sus proyectos de futuro está relacionado con la gastronomía gallega, que ella fusiona sin pudor con la finlandesa en nuevas creaciones como las empanadas de arenque. "Me encantaría ilustrar un recetario gallego y que les quede a mis hijos. Es mi ilusión y estoy intentando que mi madre recopile recetas", revela.
A corto plazo, abrirá una tienda virtual en su web profesional y planea otra centrada en decoración y diseño, además de una posible exposición en Loviisa.
Muchas ideas bullen en la cabeza de esta viguesa que aplaude el igualitario sistema social y la educación de Finlandia, aunque no le convence la sanidad del país nórdico: "La gente está orgullosa de pagar impuestos y cada año se publica una lista como la de Forbes pero con los que pagan más tributos. Y todo el mundo puede estudiar la mejor carrera, lo que da una riqueza al país tremenda".
