La Guardia Civil detuvo el jueves a José Manuel M. M., de 47 años de edad, acusado del robo en la rectoral de Ribadetea, de donde desaparecieron, el año pasado, las joyas de las vírgenes de Padróns, objetos religiosos y enseres personales del párroco. Este robo suscitó entonces una agria polémica entre los vecinos de Padróns y el sacerdote, Jesús Carrero, pues los primeros responsabilizaban al segundo de la sustracción, por no custodiar debidamente las joyas. El vecino de Ponteareas, con antecedentes por delitos contra el patrimonio, quedó en libertad con cargos tras prestar declaración en el Juzgado.

La investigación continúa abierta "a la espera de poder recuperar la totalidad de los efectos no descartando nuevas detenciones", informaba ayer la Guardia Civil, que ya ha recuperado parte de los objetos sustraidos (un televisor y un órgano), pero no las joyas, entre ellas un cáliz de plata, un cordón de oro de 193 centímetros, una cadena de oro de 48 centímetros, un anillo de oro grabado con iniciales y cinco pares de pendientes.

El robo, cuyo valor exacto todavía está por determinar, alcanzó una gran dimensión mediática tras negarse los vecinos de Padróns a acudir a misa. Las movilizaciones vecinales contra el sacerdote, que siempre defendió su inocencia, saltaron a las televisiones de ámbito estatal, hasta el punto de que el sacerdote renunció a su puesto en las dos parroquias y el pasado domingo se despidió de los feligreses de Ribadetea, los únicos que le defendían.

Tras denunciarse el robo, la Guardia Civil abrió varias líneas de investigación, que terminaron concluyendo en la detención del vecino de Ponteareas, que precisamente vive en una casa de piedra y planta baja, cuyo solar linda con la propia rectoral. Al parecer J.M.M.F. trepaba por el muro, saltaba al otro lado y penetraba en el interior de la rectoral.

Los efectivos de la Benemérita de Ponteareas sospechaban del vecino de la rectoral, y decidieron hacerle un seguimiento personal y le descubrieron intentando vender el televisión que había sustraido de la rectoral de Padróns.

Registro de la casa

Los agentes lograron autorización judicial para el registro de la casa, en la que el autor reside con su madre, su compañera sentimental y los hijos de ella. Allí, ayer por la mañana, fueron localizados otros objetos robados en la rectoral, pero no fueron halladas las joyas. Sin embargo, fuentes cercanas al caso, afirman que José Manuel, que incluso entregó voluntariamente objetos robados en otras sustracciones y que tenía escondidos en una propiedad fuera de su casa, reconoció haber cometido el robo de la rectoral y actuar solo.

El suceso se remonta al verano de 2010, coincidiendo con la llegada de Jesús Carrero como nuevo párroco a Padróns y Ribatea. Las protestas vecinales contra el cura se recrudecieron en el otoño e invierno. Desde entonces Jesús Carrero no tuvo un momento de descanso. Los vecinos de Padróns se negaron a asistir a sus misas y exigían el cambio el cambio de párroco.