La operación Campeón llegó ayer al Parlamento gallego para provocar un enfrentamiento entre el conselleiro de Economía y el BNG. Javier Guerra deslizó que los responsables de la imputación de dos altos cargos del Instituto Galego de Promoción Económica (Igape) en una trama de presunto fraude en subvenciones públicas se encontraban en el bipartito y preguntó al diputado nacionalista Henrique Viéitez por qué "no busca culpables en el anterior Gobierno". En su opinión, existen "más motivos" para que dimita algún miembro del Bloque que del actual Ejecutivo, puesto en sus filas se encuentran los "responsables" de los hechos que provocaron las dos imputaciones.
El director y el subdirector del Igape fueron detenidos e imputados en el caso que investiga un fraude de subvenciones públicas de la empresa Laboratorios Nupel, cuyo máximo responsable, Jorge Dorribo, se encuentra encarcelado.
Guerra, que suspendió temporalmente a Joaquín Varela de Limia y lo sustituyó al frente del Igape, respondió con este ataque a la petición del BNG de poner fin a la "interinidad" de este organismo, clave en la promoción económica gallega, y acusó a Economía de publicar "una noticia falsa" en su página web, aludiendo a un documento que detalla las ayudas concedidas por el Igape y la dirección xeral de I+D+I a Nupel entre 2002 y 2010 por 5,9 millones de euros.
"Ventilador"
Hace unos días, agentes de la Agencia Tributaria se presentaron en la Xunta para confiscar los expedientes de ayudas concedidas entre los años 2006 y 2008, etapa de gobierno bipartito con el BNG al frente de Economía. Este elemento generó la discusión entre Guerra y Viéitez, que le pidió no poner el "ventilador" para eludir su responsabilidad en el caso y ocultar el Diario Oficial de Galicia del 5 de noviembre de 2008 que "desmiente las acusaciones" del conselleiro, según el BNG.
Aunque en aquel año el Ejecutivo autonómico concedió 1,4 millones a la empresa investigada a fondo perdido, el diputado nacionalista recordó que el actual Ejecutivo también concedió 993.000 euros "para un proyecto de I+D+I sin un fin concreto". Guerra contraatacó indicando que esta subvención no había sido pagada todavía.
Además, defendió la presunción de inocencia de los dos cargos imputados –el subdirector, Carlos Silva sigue trababajando en el Igape pero como funcionario raso– y situó el foco en la firma Nupel, descartando irregularidades en la concesión de subvenciones por parte de Economía. "El problema no es del Ipage, sino de la empresa investigada", resumió Guerra.
