A la mesa sectorial de Educación llegó ayer el decreto con el que el Gobierno gallego pretende regular la atención a la diversidad en las aulas, además de abordar por primera a través de una normativa los problemas del absentismo, el abandono, la desescolarización. Una de las principales novedades es la posibilidad de que los jóvenes con "necesidades especiales", desde aquellos con dificultades de aprendizaje a los que se incorporen tarde al sistema o tengan "condiciones personales o de historia escolar muy desfavorable" sean trasladados a aulas específicas dentro de los colegios e institutos e incluso "crear o autorizar" centros que se encarguen exclusivamente de ellos. "Será el último recurso", asegura José Luis Mira Lema, director xeral de Educación y Formación Profesional, que enmarca la medida en el establecimiento de "un plan para la escolarización buscando las mejores medidas en centros de atención preferente y en unidades de educación especial".

"La Consellería –insiste– pretende apostar por la inclusión, por la incorporación de los alumnos en aulas ordinarias". Según Mira, el decreto define diferentes modalidades de educación ordinaria, especial y combinada, "priorizando" el primer caso y con la necesidad de un dictamen de los servicios de orientación para abordar el resto de los casos.

Los sindicatos ya avisaron a la Consellería de que el planteamiento no les gusta. Todos critican las "generalidades" del texto. Maruxa Campos, de STEG, pese a considerar importante el impulso a la norma, advierte de los riesgos de convertir las aulas específicas en "guetos". "Cuestiones como la escolarización preferente en centros específicos y aulas específicas para extender y ampliar este servicio deben de ser muy excepcionales", reclama Anxo Louzao, de la CIG.

La gran aspiración del Gobierno gallego con el decreto es "mejorar el éxito escolar" y atender a todos los alumnos con "un uso eficiente" de los recursos para así garantizar su "máxima permanencia" en el sistema educativo. Mira destaca que se van a "favorecer" ofertas formativas que garanticen que los estudiantes tengan "más éxito social". El director xeral recuerda a partir de ahora quedará establecido el marco para la atención a "perfiles muy diversos", como los alumnos que estén hospitalizados o tengan "muy altas capacidades", además de la continuación de los estudios de las jóvenes que se queden embarazadas o víctimas de violencia de género y acoso escolar. En general, Mira Lema recuerda que la "mucha normativa" dispersa y la necesidad de aglutinarla. "No se puede entender –resume– que existan planes distintos en Pontevedra, A Coruña y Lugo".

"No concreta nada, es ambiguo –critica Louzao– y no da respuesta a la necesidad que hay, en este momento, de profesorado en los centros". Desde UGT lamentan "la poca participación" en la elaboración "inicial" de la normativa y "la falta de compromiso por parte de la Consellería de Educación para que la atención al alumnado mejore. "Se limita a transcribir únicamente apartados de la LOE y sin poner recursos", asegura Raúl Gómez. José Fuentes, de CCOO, insiste en "la falta de concreción" y reprocha al departamento que no hubiera tiempo para debatirlo con los profesores.