La Xunta contratará a una empresa para que capte financiación pública procedente del Estado o de la UE que les permita sufragar proyectos de I+D. Los recortes presupuestarios a los que obliga la crisis amenazan las partidas destinadas a innovación y desarrollo, una de las áreas consideradas prioritarias por el Ejecutivo de Alberto Núñez Feijóo. Por esta razón, se están buscando vías alternativas de financiación. El propósito de la Secretaría Xeral de Modernización Tecnolóxica es arañar el máximo de recursos públicos a los programas de investigación europeos y estatales. Para ello pagará más de 245.000 euros a una empresa con el objetivo de que busque y tramite la solicitud de subvenciones ante la Unión Europea y la Administración central.

Aunque siempre ha sido tarea del personal de la Administración autonómica tramitar la solicitud de subvenciones, la Secretaría Xeral de Modernización ha decidido externalizar este trabajo en búsqueda de una mayor eficacia.

La misión de esta empresa será analizar las posibles fuentes de financiación comunitarias y estatales que contribuyan a mejorar la captación de recursos para proyectos relacionados con I+D. Pero no solo eso. La adjudicataria de este servicio deberá establecer un sistema de vigilancia continuada para tener controladas las convocatorias europeas y estatales vinculadas a la investigación. De esta manera no se perderán ninguna oportunidad.

En muchas ocasiones el Gobierno gallego se queda sin subvenciones europeas simplemente por desconocer su existencia, ya que son múltiples las líneas de ayudas que pueden llegar a ofrecerse. Pero aún solicitando estas partidas a veces el dinero tampoco llega a Galicia debido a la complejidad que supone la tramitación de estas subvenciones o bien porque no se cumplen los plazos.

En un momento de crisis económica, con un recorte previsto en los presupuestos de Galicia del próximo año de 945 millones de euros y con una deuda pendiente de pagar al Estado de 2.600 millones, que amenaza incluso los servicios públicos más esenciales, la Xunta no se puede permitir ahora perder un solo euro de estas subvenciones, sobre todo si no quiere ceder el terreno ganado en los últimos años en materia de I+D.

En cuanto a las ayudas procedentes de la Administración central, el objetivo será presentar proyectos sólidos que permitan a Galicia competir con otras comunidades y quedarse con una parte de la tarta pública en I+D.

Los fondos estatales para investigación se han recortado un 15 por ciento, lo que incrementa aún más la competencia entre autonomías por hacerse con alguna de las partidas destinadas a investigación.

Pero además de buscar subvenciones, la empresa que contrate Modernización Tecnolóxica se encargará también de tramitar el papeleo. "El adjudicatario redactará la propuesta correspondiente, así como la traducción y la presentación de toda la documentación necesaria", explica el pliego de condiciones que regirá la adjudicación de este servicio.

Para realizar estos trabajos la Xunta exigirá a la empresa personal cualificado, entre el que deberán incluirse consultores con experiencia en organismos públicos y conocedor de las normativas administrativas relacionadas con este ámbito.

A mayores de buscar financiación, la misma empresa asumirá otras tareas vinculadas al asesoramiento de la Secretaría Xeral de Modernización como son la presentación de informes de seguimiento sobre los planes que se pongan en marcha o la elaboración de otros estudios específicos.

Aunque Galicia aún está por debajo del ratio de gasto público en I+D en comparación con España y con Europa, en los últimos años el Gobierno autonómico ha reforzado su apuesta por la investigación. Según un estudio del profesor de la Universidad de Santiago, Xavier Vence, la inversión en innovación y desarrollo pasó de representar el 0,94 por ciento del presupuesto total de Galicia en el año 2005 a incrementarse hasta el 1,14 por ciento en 2007 –los últimos datos disponibles–.

Este esfuerzo ahora ha de complementarse con recursos procedentes de otras administraciones. No es el I+D la única área que requiere encontrar nuevas fuentes de financiación. La Xunta está recurriendo al capital privado para financiar infraestructuras, tanto vías de comunicación como sanitarias. Pero además de tirar de la iniciativa privada, el Gobierno gallego también intentará exprimir al máximo los fondos europeos.

No se trata solo de captar subvenciones. Galicia se ha aliado con otras regiones para ejercer presión ante la UE con el objetivo de que Galicia siga recibiendo dinero más allá de 2013.