De siete de la mañana a tres de la tarde. Todas las gasolineras de Galicia que ayer hicieron su pedido a las distribuidoras en ese horario se encontraron con un nuevo corte de suministro de la Compañía Logística de Hidrocarburos (CLH). Como alternativa, por tercera ocasión desde el sábado, la operadora que almacena el combustible en A Coruña y Vigo, desvió los encargos de carburante a sus instalaciones más próximas fuera de la comunidad -Gijón y León-. Este nuevo parón dejó a decenas de estaciones de servicio desabastecidas de gasóleo A, el que utilizan el 90% de los usuarios, durante unas ocho horas hasta que llegó el carburante procedente de los depósitos de Asturias y Castilla y León.

Las gasolineras atribuyeron este nuevo corte de suministro a las averías causadas por una partida de gasóleo dañada. Según revelaron las inspecciones de la Consellería de Industria hechas el mes pasado en estaciones de servicio de Pontevedra, la "anomalía" en el gasoil se debe al incumplimiento de una norma de la UE, lo que provoca que a una temperatura superior a la exigida aparezcan partículas obstructivas y tupan los filtros del gasóleo. Este problema fue el que dejó tirados en la carretera a centenares de turismos y camiones en el mes de octubre.

Los transportistas afectados ya han hecho balance de los daños. Según el presidente de la Plataforma para la Defensa del Transporte, Manuel Núñez, son más de 500 los camiones afectados por las partidas de gasoil en mal estado, la mayoría en Pontevedra y Ourense.

Una semana después de que se produjesen las primeras quejas, Repsol y CLH continúan investigando las causas de las averías en los filtros del gasoil. El producto que sale de la refinería y la operadora, según insistieron, cumple las especificaciones técnicas de calidad. Sobre la ola de reclamaciones, CLH habla de un hecho "puntual" ya que -asegura- los problemas han remitido. Ante los últimos resultados de las inspecciones de la Xunta, la compañía negó ayer que la anomalía haya sido provocada por la mezcla que se hace del combustible con los aditivos de cada marca y se desvinculó del incumplimiento de la norma de la Unión Europea en cuanto a temperaturas.

Por este motivo, aseguraron que pese a paralizar el suministro de CLH en Galicia por tercera vez en seis días, el corte responde a la programación prevista, se hace por "razones de operatividad" y "nada" tiene que ver con las averías de los últimos días. Por el contrario, las estaciones de servicio advirtieron de que el único parón que CLH hacía a diario hasta que se registraron fallos en los coches, era una interrupción entre las 11.00 a 13.00 horas para el recuento de las cisternas que fueron a la base a recoger combustible.

Los resultados de las 100 inspecciones ordenadas por la Xunta en las 40 gasolineras de Galicia donde se registraron reclamaciones se darán a conocer en dos semanas. La información será remitida a Repsol y CLH para que analicen el origen de la anomalía en la partida de gasóleo dañada.