El Gobierno ha elegido al magistrado del Tribunal Supremo Julián Sánchez Melgar para reemplazar a José Manuel Maza al frente de la Fiscalía General del Estado. Tras el fallecimiento de Maza en Buenos Aires el pasado sábado, el Ejecutivo anunció que consultaría con sus dos "socios" del bloque constitucionalista, el PSOE y Cs, antes de decidir el nombre del sustituto, pero ambos partidos dejaron ayer muy claro que no lo ha hecho.

El Gobierno no está obligado a contar con más opinión que la suya para decidir quién dirigirá el ejercicio de la acción penal, pero después de lo dicho los socialistas esperaban ser escuchados. El malestar era ayer evidente. La portavoz del PSOE en el Congreso, Margarita Robles, admitió que el elegido tiene una trayectoria jurídica "objetiva", pero afeó al Ejecutivo que "ni siquiera por una cuestión de cortesía" se haya dirigido a su partido.

Robles agregó que el PSOE no se siente "concernido" por el nombramiento de Sánchez Melgar, y lo consideró "oscurantista". La vicesecretaria general, Adriana Lastra, fue más dura aún. Ve en la designación un "nombramiento político que responde a los intereses del Gobierno, como lo fue en su momento el de (José Manuel) Maza".

"Es más de lo mismo, un fiscal conservador que apoya al gobierno y que nombra un gobierno conservador", criticó. Y aventuró que el Ejecutivo sí habrá pactado el nombre con Cs. Fuentes de esta formación, sin embargo, lo negaron, argumentando que tampoco lo esperaban, dado que "es una decisión del Gobierno".

Como su predecesor, Sánchez Melgar procede la Sala de lo Penal del Supremo, de manera que la continuidad de la línea de acción penal seguida por Maza está asegurada. "Los fiscales que dirigen coordinan, pero no hacen que cambie el rumbo de la nave sustancialmente", explicó el ministro de Justicia, Rafael Catalá.

Y menos aún en el caso del desafío independentista: Sánchez Melgar es uno de los cinco jueces del Supremo que admitió a trámite la querella del ahora fallecido Maza contra la Mesa del Parlamento catalán.

Catalá se declaró convencido de que el nuevo fiscal general "va a suscitar un apoyo unánime" entre todos los grupos parlamentarios y que tendrá el "máximo apoyo y reconocimiento". El titular de Justicia cree que sus "capacidades profesionales están más que acreditadas".

Las tres asociaciones de fiscales de España destacaron el prestigio jurídico del magistrado. La presidenta de la conservadora Asociación de Fiscales, Cristina Dexeus, elogió además su "gran capacidad de comprensión y diálogo". Pero el presidente de la Unión Progresista de Fiscales, Emilio Fernández, reconoció que habría preferido que se tratara de alguien procedente de la carrera fiscal.

Lo mismo que echa en falta Jueces para la Democracia, que advirtió que la designación de Sánchez Melgar no beneficia ni a la "credibilidad" y ni al "respeto" al Ministerio Público.