La comparecencia de ayer del presidente del Gobierno fue criticada con dureza por todos los partidos políticos, que no ahorraron adjetivos descalificadores para la legislatura que está a pocos meses de concluir.

El secretario de Acción Política del PSOE, Patxi López, sostuvo que el curso político y toda la legislatura pueden resumirse en una sencilla fórmula: "ayudas a los privilegiados y abandono de la mayoría". López estimó que con su mayoría absoluta Rajoy ha puesto en marcha políticas que han "condenado a una gran mayoría de la sociedad española" y han beneficiado a "unos pocos privilegiados". "Está construyendo una España insoportable para los humildes", dijo, porque el crecimiento "se queda en unas pocas manos", mientras aumenta la desigualdad "de manera obscena".

Desde Podemos, su secretaria de Coordinación ejecutiva, Ángela Ballester, aseguró que Rajoy presentó un país que "no es real" sino "el país de Mariano Rajoy, donde todo va bien". Para Podemos, hay "una gran distancia" entre la España de Rajoy y lo que "realmente está viviendo la sociedad española". La formación morada considera además que la aprobación de unos Presupuestos antes de las elecciones generales de fin de año pretende "limitar la capacidad política del siguiente Gobierno y limitar la voluntad popular".

El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, acusó al presidente de dejar "un país sin rumbo" y que está "peor que nunca", y calificó de "negativo" el balance de una legislatura en la que España ya "no está en coma profundo, pero está en la UCI".

El candidato de IU a La Moncloa, Alberto Garzón, criticó la tendencia de Rajoy a escabullirse en las preguntas sobre corrupción y proclamó que "el PP es una trama de corrupción que se presenta a las elecciones" y que la "retórica" del presidente sobre los casos que afectan al PP es "absolutamente insuficiente" porque, añadió, no va acompañada de la asunción de responsabilidades políticas.