El informe de los servicios jurídicos de la Generalitat sobre la sentencia del Tribunal Constitucional (TC) que anuló la declaración de soberanía del Parlament concluye que dicho fallo da un "sólido amparo" al ejercicio del derecho a decidir de Cataluña y supone un "revés" a algunas de las pretensiones del Gobierno.

Tras analizar las conclusiones de este informe, el portavoz, Francesc Homs, afirmó que "es posible organizar una consulta de acuerdo con el ordenamiento jurídico, y esta argumentación, desde la perspectiva del Govern, nos será de utilidad para organizarla el 9 de noviembre".

"Pensábamos que ya teníamos argumentos, pero no teníamos una sentencia del TC que diga que cabe -el derecho a decidir- en la Constitución", añadió Homs, quien consideró que la "virtud" de que el alto tribunal se haya pronunciado es que "da un sólido amparo jurídico a las actuaciones impulsadas por las instituciones catalanas para hacer efectivo el derecho a decidir". El portavoz de la Generalitat apeló al Gobierno para que admita que sus argumentos, en su mayoría, no han sido aceptados.

A una semana del debate del 8 de abril en el Congreso sobre la consulta soberanista, el Gobierno sigue sin despejar la incógnita sobre si intervendrá en el Pleno, interrogante que se acentuó al saberse que Mariano Rajoy no acudirá a la sesión de control en el Senado que se celebra a la misma hora.

Todo indica que el Gobierno pedirá la palabra, aunque falta conocer en qué momento del debate y con qué protagonista. Tampoco la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, estará en la Cámara alta. El PP responderá con un "no dialogante" al Parlament cuando sus representantes defiendan el próximo martes ante el Pleno que se delegue en la Generalitat la competencia para convocar la consulta soberanista.

El PP defenderá el derecho de los catalanes a ser españoles, y el PSOE ofrecerá una solución dialogada y aún no confirma la intervención de Rubalcaba. Cayo Lara dejará a ICV la representación de la Izquierda Plural. CiU, ERC e ICV han accedido a retirar las dos "copias de seguridad" del texto del Parlament que habían registrado, de modo que sólo se debatirá un punto en el orden del día.