El pleno del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha aprobado un documento que, con el objetivo de optimizar recursos en un contexto de crisis económica y adaptar las estructuras al actual marco territorial, fija los criterios que permitirán reducir de 431 a entre 190 y 200 los partidos judiciales.
El documento al que hoy ha dado el visto bueno el CGPJ no contiene el diseño concreto del nuevo mapa judicial, que se abordará en un pleno extraordinario el próximo 3 de mayo, pero si los principios básicos que a juicio del órgano de gobierno de los jueces deben orientar la reforma de la demarcación judicial.
Las propuestas del Consejo, según ha explicado la portavoz del CGPJ, Gabriela Bravo, en rueda de prensa, buscan lograr una mayor eficacia y seguridad en la administración de Justicia y apuestan por la especialización y la cercanía a los ciudadanos.
En este sentido, defienden una fusión de partidos judiciales que permita la separación de jurisdicciones de órganos que son los que tienen un trato más directo con el ciudadano y, a su vez, facilite una mayor agilidad en la tramitación de los procesos y eficacia en la labor jurisdiccional.
La atención y la proximidad de la Justicia "no puede medirse en kilómetros, sino en tiempo y servicios", según el documento aprobado por el Consejo, que aboga por que el desplazamiento del ciudadano al juzgado y su presencia en las oficinas judiciales se reduzca a los supuestos "estrictamente necesarios" gracias a la comunicación telemática y el uso de las nuevas tecnologías.
En función de esos criterios, el CGPJ cree que la separación de órdenes jurisdiccionales exige un mínimo de 8 juzgados para garantizar un funcionamiento correcto de la administración de Justicia, por lo que la reordenación habrá de intentar reunir esa cifra, además de atender a las circunstancias territoriales, geográficas, políticas y económicas de cada zona.
Con la aplicación de esas medidas, el Poder Judicial cree que se podrán reducir a la mitad, de 431 a entre 190 y 200, los actuales partidos judiciales, aunque el nuevo mapa judicial que propone no se aprobará hasta el 3 de mayo, ya que se ha acordado dar un plazo de dos semanas a los vocales para que puedan plantear las observaciones que estimen oportunas.
En su propuesta inicial, el Consejo concluye que la implantación de ese nuevo mapa judicial debe hacerse de forma "progresiva, flexible y en el marco de una reforma global mucho más ambiciosa" con la implantación de los tribunales de instancia y que apueste por los jueces titulares y reduzca la Justicia interina a supuestos excepcionales.
