El presidente del PP, Mariano Rajoy, defendió ayer por primera vez en público la candidatura del ex ministro y ex director del Fondo Monetario Internacional (FMI), el asturiano Rodrigo Rato, para presidir Caja Madrid, y aseguró que "si alguien no lo cree (así), que lo diga".

Esta opción es la que defiende también el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, y que ha provocado la guerra abierta con la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre.

Sin embargo, horas después de las declaraciones de Rajoy, Aguirre aseguró: "Yo no tengo ningún candidato y no soy yo quien tiene que decidir", para añadir después que "el señor Rato es sensacional, el señor González colosal, el señor Luis de Guindos, imposible mejor, y el señor Pizarro, excepcional", y que buscará el consenso .

Rajoy subrayó que no está "negociando nada" con Esperanza Aguirre para alcanzar un acuerdo sobre Caja Madrid, y recalcó que la dirección nacional tiene sus competencias y la dirección regional las suyas.

En declaraciones en Antena 3, Rajoy afirmó que en Caja Madrid hay que poner "a los mejores" y a personas "respetadas", "con competencia, capacidad y reconocimiento", cualidades que, a su entender, cumple Rodrigo Rato.

"Creo que sería un extraordinario presidente de Caja Madrid y si alguien no lo cree (así) que lo diga. A ver quién puede ponerle una pega con la trayectoria que tiene el señor Rato", enfatizó a continuación, para recalcar que el ex ministro no es su "rival" ni le ha "apuñalado".

Ante la crisis interna que está viviendo el PP por Caja Madrid, el líder de la oposición señaló que "la clave" es saber tomar las decisiones en el momento en que hay que tomarlas. "Yo manejo mis tiempos y tomo mis decisiones en el ejercicio de mis responsabilidades", resaltó.

Además, rechazó tajante que en el partido haya un problema de baronías, porque la dirección nacional tiene sus competencias y la regional las suyas.

Candidatos

Aguirre, por su parte, consideró "magníficos" y "colosales" a "todos" los candidatos que se han planteado para presidir Caja Madrid, pero resaltó que ahí sigue el recurso del Ayuntamiento de la capital que paraliza el proceso electoral en la entidad.

La presidenta autonómica insistió en que a ella no le corresponde designar a los candidatos a presidente, sino que esta decisión la tomarán los miembros de los órganos de la entidad, "como siempre".

Subrayó que a los ciudadanos no les interesa saber "si a uno les gusta éste o les deja de gustar el otro". "Eso tiene que ser fruto de un consenso y a mí si me preguntan, todos los nombres que han salido me parece colosales pero no soy yo quien tiene que decidir", añadió Aguirre, quien precisó que ella no tiene ningún candidato y que Ignacio González, lo único que ha hecho ha sido conformar un consenso que, además, está conseguido.

Mientras tanto, el comité nacional de derechos y garantías del Partido Popular citó al vicealcalde de Madrid, Manuel Cobo, para que comparezca el 4 de noviembre y explique sus declaraciones contra Esperanza Aguirre.

Y la guerra interna en el Partido Popular continúa. El secretario general del PP de Madrid y consejero de Presidencia, Justicia e Interior del Gobierno regional, Francisco Granados, aseguró ayer que los afiliados de Madrid están "de manera abrumadora" con Aguirre. "Quien no lo entienda es que no conoce la realidad del partido", afirmó a continuación.