El presidente del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo, advirtió ayer en Valladolid a "todos los que esperan que al PP le vaya mal" de que "se sentirán defraudados el 22 de junio", día en que se celebrará el Congreso Nacional. "Todos los adversarios políticos que deseaban que nos fuese mal verán frustrados sus peores augurios", sentenció el líder de los 'populares' gallegos y avisó a los socialistas "que se están frotando las manos, que se las sigan frotando a ver si entran en calor" porque "se van a quedar fríos después de ver el éxito del Congreso en junio". De este modo, Feijóo postuló a Rajoy como "la mejor alternativa" al Gobierno socialista y defendió que ve un líder "decidido y seguro, sin titubeos, que se manifestó claramente". En este sentido, apeló al "esfuerzo" de todos los afiliados para "superar estos momentos precongresuales, no exentos de dificultades" y les aseguró que "no dejarán que sean otros los que quieran definirlos a través de falsas etiquetas".

Por otra parte, quince responsables autonómicos del PP, doce presidentes y tres secretarios regionales, entre ellos el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, respaldaron en el acto de Valladolid la candidatura de Mariano Rajoy a la presidencia de este partido en el Congreso de Valencia, y avalaron que los principios de los "populares" no han cambiado.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, no acudió a la cita porque tenía "compromisos familiares", según se informó, y tampoco designó ningún sustituto que hablara en su nombre.

Lo mismo ocurrió con el País Vasco, ya que no se envió ningún representante de María San Gil, al no haber recibido invitación para acudir a esta cita de Valladolid, informaron fuentes del PP vasco. No obstante, sí acudieron dirigentes de las tres provincias, entre ellos, el ex alcalde de Vitoria y diputado, Alfonso Alonso, así como el secretario general de Alava, Iñigo Oyarzábal, aunque ninguno subió a la tribuna de oradores.