La noche electoral para el En Marea en Vigo no fue todo lo dulce que se esperaba. A pocos minutos de que diese comienzo el recuento de votos, la candidata de esta coalición al Congreso por la provincia de Pontevedra, Alexandra Fernández se mostraba "cauta y reservada" ante los primeros sondeos. Tras el escrutinio final, la cabeza de lista, que se encontraba en Santiago en el acto central del partido, reconoció que el resultado final no era "el esperado" aunque valoró la "consolidación de En Marea en Galicia" aseverando que "continúan siendo la fuerza política que disputará la mayoría absoluta al Partido Popular".

La coalición formada por Podemos, EU y Anova no solo dejó de ser la segunda fuerza en Galicia en detrimento del PSOE al pasar de seis a cinco escaños, sino que perdió su "cetro" en Vigo, donde la fuerza más votada ha sido el PP con una diferencia de 1.400 votos. Si seis meses atrás, En Marea lograba en la ciudad olívica 59.691 votos, en esta ocasión fueron 50.369 los vigueses, el 30,34%, que declinaron su voto por esta coalición en un escenario donde la participación también se redujo en aproximadamente 10.000 ciudadanos.

Dos escaños por Pontevedra

En cuanto a la provincia de Pontevedra, En Marea conserva sus dos escaños en favor de Alexandra Fernández y Ángela Rodríguez. La primera aseveró que seguirá "trabajando para reforzar la coalición y recuperar los votos perdidos". Fernández reiteró "que las intenciones de pactos siguen intactas, en la misma línea. Hemos notado que hay voluntad de cambio y el objetivo último sigue siendo el mismo: derrocar el gobierno de la derecha". Otro de los objetivos que se planteaba la coalición desde su formación era la creación de un grupo parlamentario propio que a raíz de la pérdida de este escaño puede volverse todavía más utopía, aunque la candidata prefirió no entrar en el debate. Sí reafirmó la necesidad de un "entendimiento entre las izquierdas" para que no se realice una tercera vuelta.

En la sede viguesa de En Marea, fueron muchos los que se reunieron una vez cerraron los colegios electorales. Incertidumbre al principio, ánimo de remontada minutos después y cierta decepción una vez se produjo el recuento final, fueron los sentimientos que mostraron el medio centenar de simpatizantes que decidieron seguir el recuento en Camelias, 85. "¿Para esto hemos hecho una segunda vuelta?", reprendía al televisión una votante indignada.

José Cid Cabido, portavoz de Anova, no se mostraba del todo contrariado por los resultados, valorando más positivamente la consolidación de En Marea frente a la pérdida de votos y escaños. "El sorpasso todavía es posible en Galicia. El panorama no ha cambiado en exceso, el resultado es más o menos el esperado, las diferencias son mínimas aunque supongan la pérdida de una escaño", destacó el vocal. Al contrario que la cabeza de lista al Congreso, Cabido señaló que la abstención sí se vio reflejada en el resultado final.