Tras casi una década de letargo en la comunidad, los promotores se preparan para elevar de forma considerable la construcción de nuevas viviendas. Entre los meses de enero y febrero se registraron un total de 515 visados de obra en Galicia, según el Ministerio de Fomento. La cifra (de las cuales 163 son viviendas unifamiliares y 352, pisos) es más del doble que la alcanzada en el mismo periodo del año anterior, cuando a estas alturas se registraban un total de 245.

El empacho de vivienda de nueva construcción que la comunidad heredó de la época del boom inmobiliario provocó que la comunidad cargase con un pesado stock de vivienda nueva. Pero ahora, en plena recuperación del sector inmobiliario, que en la comunidad se visibiliza con el fuerte incremento de los alquileres, este stock de 24.565 viviendas se encuentra en su nivel más reducido desde el estallido de la crisis y acelera los planes de los promotores para levantar nuevas edificaciones residenciales y paliar el "déficit de nueva vivienda" que detecta el sector. Según las estimaciones del presidente de la Asociación de Promotores Inmobiliarios de Pontevedra (Aproin), Javier Garrido, Galicia debería multiplicar por cinco la construcción de viviendas respecto al año pasado para alcanzar las "7.000", donde se sitúa "la demanda latente".