El Grupo PSA pulverizará todos sus récords de facturación este año. El estirón dado con la reciente integración de Opel y Vauxhall y el buen desempeño en los países emergentes darán el impulso necesario para que el grupo galo consiga derribar el techo de ventas al que tantas veces se enfrentó y que siempre se le había resistido: los 60.000 millones de euros.
La firma publicó ayer sus datos de ventas de los nueve primeros meses del año en los que se refleja que los ingresos de la compañía avanzan a ritmo de doble dígito tanto en el trimestre como en el acumulado del año. Con los 14.988 millones de euros cosechados en el tercer trimestre, el grupo eleva ya a 44.154 millones de euros lo facturado en los nueve primeros meses del año, lo que representa un alza del 12,7% respecto al mismo periodo del año anterior. Si la compañía logra mantener el ritmo comercial de otros años en la recta final del año, su cifra de negocio cerraría 2017 en torno a los 60.470 millones de euros, lo que supondría superar el récord histórico de 58.676 millones de euros alcanzado hace exactamente una década: en 2007.
Buena parte de la responsabilidad de este hito descansa sobre tres patas. Por un lado, la integración de Opel y Vauxhall, que en solo dos meses aportó 2.789 millones de euros en ventas. Por otro, el tirón de los vehículos comerciales ligeros, con especial repercusión para la factoría de Balaídos, de donde salen la Peugeot Partner y el Citroën Berlingo, cuyas ventas repuntan un 4,3% y un 1,6% respectivamente -ver gráfico-. A estas dos se suma una tercera como es el fuerte crecimiento en los países en desarrollo, y que cobra especial fuerza en Sudamérica y Oriente Medio. En esta última región duplica sus ventas gracias a la reactivación del mercado de Irán, lo que permite compensar el desplome sufrido en el este del continente y la caída del 10,6% en las ventas de Citroën.
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Las ventas en China caen a las 242.000 unidades entre enero y septiembre, casi la mitad que en 2016, y desde el diario Les Echos revelan que el grupo está interesado en vender o alquilar la factoría de Wuhan, la mayor en el país en una operación en la que Honda se postula como comprador.
Mayor valor por venta
El volumen de vehículos comercializados no crece al mismo ritmo que su cifra de negocios. Lo hace un 8,9%, hasta los 2,22 millones. La razón se encuentra en el aumento del precio medio de cada vehículo vendido. Y es que de los datos de PSA se extrae que los vehículos de Peugeot, Citroën y DS comercializados hasta septiembre tuvieron un valor de venta de 12.540 euros. Esta cifra es 524 euros más que en el mismo periodo de 2016 por el avance de algunos de los nuevos lanzamientos de mayor gama, aunque todavía se sitúa muy por debajo de los de Opel y Vauxhall.
En el caso de las dos marcas adquiridas, el valor medio por vehículo escala hasta los 16.903 euros, tanto por el foco sobre un segmento de más alta gama como por los mayores costes operativos, sobre los que Carlos Tavares, presidente ejecutivo de PSA, se mostró partidario de actuar la semana pasada, tras señalar que son un 50% superiores a los de sus factorías francesas.
