El 29 de enero de 2014 Pemex Exploración y Producción (PEP), filial del gigante petrolero mexicano, adjudicó a Hijos de J. Barreras la construcción de uno de los dos floteles para prestar servicio al personal de las plataformas offshore (el otro lo construyó Navantia, está en venta y no se ha movido de Ferrol). Quince días después la dirección del astillero se dirigía a la Dirección General de Industria para solicitar una línea de ayudas a la innovación a fin de facilitar la construcción del buque, pero le fueron denegadas en junio de ese mismo año. El Tribunal Superior de Justicia de Madrid acaba de sentenciar que esta decisión no fue motivada y obliga al departamento que dirige hoy Fernando Buisán a realizar una valoración del Reforma Pemex para determinar si, como reclama el astillero vigués, sí debería haber percibido apoyo público.
En la demanda Barreras no cifra a cuánto ascenderían estas ayudas, que según la ley comunitaria no pueden superar el 20% del valor del proyecto "siempre que se refieran a la aplicación industrial de productos y procesos innovadores". Y, para el astillero, el diseño y ejecución de este Accommodation Support Vessel (ASV, comúnmente conocido como flotel) sí las tiene. "Es el primer buque de esta naturaleza proyectado y construido en España -expone la firma viguesa-, que comporta la implantación de gran número de innovaciones de procesos nunca antes instaurados". De hecho el perito ponente en la causa aseguró que, "por mucho que se base en el proyecto del Edda Fides [el de la armadora Østensjø Rederi, entregado en 2011, fue el primer flotel concebido como tal], es un hecho innovador para la ingeniería naval española sin duda alguna". Capacidad, componentes, confort a bordo, mejora hidrodinámica, nuevos elementos propulsores, tecnología safe return to port... son algunos de los elementos innovadores con los que Hijos de J. Barreras refuta la decisión de Industria.
Para los cuatro magistrados que firman la sentencia, del 26 de septiembre, queda probado que no existe una "motivación bastante para concluir por qué se le deniega la ayuda" a Hijos de J. Barreras. El importe completo del contrato de Pemex, con los dos floteles para Vigo y Ferrol, ascendió a unos 300 millones de euros. De hecho el informe elaborado por Fundación Instituto Tecnológico para el Desarrollo de las Industrias Marítimas (Innovamar), que recomendó a Industria denegar las ayudas al astillero vigués, ni siquiera identificaba al técnico o especialista que lo había redactado. El texto llega incluso a mencionar un barco que no existe, el Safe Britannia. Y dado que no existe un informe válido que determine si a Barreras le corresponde o no apoyo público, la sala, en un fallo contra el que cabe recurso de casación, el TSJ ordena realizar una "valoración de la solicitud con los adecuados informes" y "se retrotraiga el expediente al momento anterior a la emisión".
