Las patronales que negocian el nuevo convenio colectivo del sector del metal de la provincia de Pontevedra han mejorado su oferta económica para el primero de los tres años de vigencia del texto. Así, han elevado del 0,75% al 1% la subida salarial para el ejercicio 2017, equiparándola a las de los años 2018 (1%) y 2019 (1%). Los empresarios también están dispuestos a regular la actuación de las empresas multiservicios en el sector e insisten en abonar la indemnización por fin de contrato eventual al final del propio contrato, y no prorrateado mes a mes, como hasta ahora.

El próximo 15 de junio, empresarios y sindicatos volverán a sentarse en la que será ya la décima reunión de negociación del convenio provincial. La patronal es optimista con respecto a la marcha de la negociación y confía en firmar ya un acuerdo en la siguiente reunión, mientras que los sindicatos (CC OO, UGT y CIG) consideran que las posturas siguen muy alejadas. El convenio del metal de Pontevedra es uno de los más importantes a nivel autonómico, ya que representa a más de 30.000 trabajadores y unas 1.500 empresas de los diferentes subsectores metalúrgicos.

A Coruña

En la provincia de A Coruña, la falta de acuerdo con los empresarios ha llevado a los sindicatos a convocar movilizaciones. El anterior convenio, que afecta a unos 20.000 trabajadores en la provincia, expiró en diciembre de 2014, por lo que los empleados llevan dos años y medio con los salarios congelados. Los sindicatos consideran prioritario que el nuevo convenio colectivo del metal coruñés establezca la subrogación -incorporación a la plantilla- de los trabajadores de las contratas, la regulación de las guardias localizadas fuera de la jornada laboral, recuperar la revisión salarial, mejorar las licencias retribuidas, limitar la utilización de empresas de trabajo temporal (ETT) e incrementos salariales con los que recuperar poder adquisitivo.