La compañía viguesa GTG Ingenieros, con más de veinte años de experiencia en el ámbito de la seguridad industrial en maquinaria, inauguró ayer su nueva planta de Porto do Molle, que ocupa más de 3.400 metros cuadrados y en la que ha invertido 1,8 millones de euros. Al acto han acudido la secretaria xeral de Emprego, Covadonga Toca, y la delegada de la Zona Franca de Vigo, Teresa Pedrosa, entre otras autoridades, así como portavoces de proveedores y clientes.

La empresa, que comenzó su actividad con una línea de negocio centrada en la adecuación de maquinaria para prevenir accidentes, comparte ahora esta actividad con el diseño y desarrollo de dispositivos exclusivos como sistemas antiatropellos de vehículos industriales (carretillas elevadoras), sistemas antiarrollamientos de puentes-grúa, de detección de inclinaciones en puentes-grúa, pulseras de localización, etc. Así hasta una treintena de productos que GTG Ingenieros comercializa por todo el mundo.

La planta de Nigrán cuenta con una línea de prototipado y equipamientos de última generación. El consejero delegado de GTG Ingenieros, Pedro García-Trejo González, aprovechó el acto para presentar un nuevo equipo de seguridad que automatiza y digitaliza el protocolo de chequeo de las seguridades de cualquier máquina, línea o instalación industrial. Se trata de un "equipo innovador", diseñado y fabricado por su departamento de I+D, que en el entorno de la industria 4.0 permite gestionar desde cualquier dispositivo y en cualquier momento los elementos de seguridad de cualquier máquina.

La empresa gallega ha internacionalizado en los últimos años su cartera de clientes, entre los que destacan las grandes mineras que operan en Chile, así como industrias de países como Brasil, Alemania o Estados Unidos, entre otros. Una de sus últimas innovaciones es un sistema antivuelco para vehículos agrícolas, de trabajos en montes, canteras y zonas de movimiento de tierras, capaz de prevenir accidentes por vuelcos.