Las acciones del fabricante español de componentes para automóviles Gestamp Automoción, con planta en Vigo, cerraron su primer día de cotización en Bolsa -la tercera salida en lo que de año tras Prosegur Cash y Neinor Homes- con una fuerte caída del 4,46%, hasta situarse en 5,35 euros por cada título de la compañía. El presidente de la firma, Francisco Riberas, calificó de "anecdótica" la caída y tranquilizó a los accionistas porque "han invertido bien su dinero" y la empresa es "un buen socio a largo plazo".

Los títulos de Gestamp debutaron a un precio por acción de 5,58 euros, lo que representaba una ligera caída (-0,3%) con respecto al precio de 5,6 euros establecido para su estreno bursátil y que valoraba la compañía en 3.222 millones de euros. El retroceso inicial se ahondó minutos después de marcar su primer precio, registrando descensos de entorno al 3%, que se llegaron a acentuar en algunos momentos hasta el 8,75%.

Riberas señaló que su empresa creció de forma ininterrumpida en los últimos años y afirmó que su previsión es seguir aumentando su facturación, después de ingresar más de 7.500 millones en 2016 (un 7,3% más).