Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La patronal gallega clausura su único plan empresarial y rebaja la plantilla a la mitad

Ocho plataformas Pexga dejaron de prestar servicio a la CEG a 31 de diciembre -Despide a cuatro empleados adscritos al programa al no haber negociado su prórroga con la Xunta

Antonio Fontenla. // Xoán Álvarez

Galactea Plus, Galactea Plus KAM, Orientación Laboral, Eurest y, hasta hace doce días, el Pexga. Son los cinco programas económicos que gestionaba la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG) a cambio de fondos públicos y que ha perdido en menos de un año. El último era la Rede de Plataformas Empresariais no Exterior de Galicia, el afamado Pexga, gracias al que tenía presencia en otros ocho países y cuyos gastos cubría la Xunta con una partida de 1,8 millones al año. El convenio entre la CEG y el Instituto Galego de Promoción Económica (Igape), de carácter bianual, expiró el 31 de diciembre sin que hubiesen arrancado las negociaciones para prorrogarlo.

Ahora la patronal gallega ha despedido a los cuatro trabajadores que se encargaban de los trámites del Pexga (el director y tres técnicos), lo que eleva a ocho las bajas en poco más de tres meses (con una empleada el vínculo laboral cesó de mutuo acuerdo, según fuentes próximas a la confederación). En enero de 2016 la plantilla de la CEG era de 20 personas. Este escenario, el de los ocho despidos, era el segundo más agresivo de los tres que había elaborado la fugaz directiva de Antonio Dieter Moure. Eso sí, en ese momento la patronal daba por hecho el mantenimiento de la red Pexga. Entonces el plan de viabilidad -el primero de tres versiones- calculó en casi 256.000 el coste de las rescisiones de contratos, presumiblemente inferior al real teniendo en cuenta el despido del exsecretario general, Fausto Santamarina (con un salario de más de 100.000 euros) y otros dos directivos de la cúpula (con un coste salarial de entre 4.600 y 4.800 euros al mes por cabeza).

Pero, y pese a haber coqueteado con el concurso de acreedores en julio, la patronal empresarial gallega a quitado los problemas económicos de su lista de prioridades. El pool bancario ha accedido a conceder una nueva hipoteca sobre la sede por 1,2 millones de euros y la póliza que le adelantó Abanca en verano por otros 600.000 euros le ha permitido superar los últimos meses sin sobresaltos. El Pexga, aunque conlleva una partida cuantiosa de fondos públicos, no deja dinero en la caja de la CEG y, a ojos de algunos directivos, pesa menos su beneficio institucional que los contratiempos que genera.

El propio Antonio Fontenla, sempiterno presidente de la patronal coruñesa (lleva desde el 2000 y aspira a seguir hasta 2020) y previsible candidato al sillón de la CEG, restó relevancia a la pérdida de una red empresarial que otorgaba a la patronal presencia física en China, Estados Unidos, Brasil, México, Reino Unido, Rusia, Marruecos y Colombia. "Tenemos que adelantar dinero y no lo tenemos. La Xunta pone dinero pero nos crea unas tensiones y unas cosas con el Igape que, chica, si estás haciendo algo y te ponen problemas, que las haga otro", declaró a FARO en agosto.

El expediente

Pero durante su mandato en la CEG (2001-2013) el coruñés sí aprovechó la red de oficinas en el exterior. Tras su gestión al frente de la patronal el Igape detectó que casi 650.000 euros del programa se habían gastado indebidamente en alquileres y fianzas de los locales (al ser un pago y no un gasto recuperable) o servicios de chófer y noches de hotel por cuantías "excesivas y muy superiores a los precios de mercado" en México, Moscú o París. La CEG llevará ahora a la Xunta a los tribunales al haber interpuesto un contencioso-administrativo por esta resolución.

Compartir el artículo

stats