El Gobierno de Colombia ha procedido a la intervención de la filial de Gas Natural Fenosa, Electricaribe, después de que las negociaciones entre el Ejecutivo del país y la cúpula directiva del grupo energético español para encontrar una solución a la crisis abierta no se hayan concretado en un acuerdo. En concreto, la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios anunció la toma de posesión de los bienes, haberes y negocios de Electricaribe.

El ministro de Minas y Energía, Germán Arce, confirmó la suspensión de las negociaciones con Gas Natural Fenosa por "falta de capitalización" y señaló que la "toma de posesión de Electricaribe es la mejor alternativa para garantizar servicio de energía para familias e industria" de la región. Gas Natural Fenosa ha cifrado en 4.074.328 millones de pesos colombianos (1.259 millones de euros) la deuda que acumula por impagos de clientes de electricidad en Colombia a cierre de septiembre.

El presidente de Gas Natural Fenosa, Isidro Fainé, viajó el pasado fin de semana a Colombia para reunirse con miembros del Ejecutivo colombiano, entre ellos el presidente José Manuel Santos, para abordar la crisis abierta por la filial. El grupo español expresó ayer su interés en "cooperar y colaborar" con las autoridades colombianas y asegura que la intervención no afectará a su política de dividendos. La compañía explicó que mantiene la consolidación de Electricaribe en su contabilidad por el método de integración global y expresa su confianza en que la "administración temporal" de su filial "no tenga impacto sobre la operativa habitual de la sociedad".