Pescanova es la sexta marca de gran consumo en los hogares españoles y, pese a estar en concurso de acreedores (y a haber protagonizado un escándalo empresarial de dimensión internacional), en 2014 recibió un valor financiero de 241 millones de euros por parte de Brand Finance. Estaba entre las veinte más cotizadas, por delante de Cola Cao, Tous o Chupa Chups. Ahora la multinacional prepara un restyling de su marca, su tesoro, que lleva dos décadas viéndose con el mismo look frente al espejo. Fuentes internas de la compañía han confirmado, la intención no es hacer una revolución, sino un gesto enfocado a un target más amplio de consumidores y para adaptarlo a los nuevos formatos en los que trabaja el equipo de Ignacio González.

Los ejes que emplearán serán aportarle volumen a las tipografías de las letras", dicen las mismas fuentes, que explican que "se valora emplear algún estilo de letra distinto pero muy parecido al actual", y eliminar el borde que rodea la marca para facilitar la ubicación de la misma en distintos puntos de los envases". No se descarta incluso "emplear algún tipo de abreviatura que sea claramente identificable con la marca actual" enfocada a un consumidor más joven: los millenial de entre 25 y 35 años. De momento, eso sí, no se ha tomado ninguna decisión firme.

En este target de gente joven la intención pasa por centrarse en "aquellos perfiles actitudinales que no rechazan el consumo de pescado y proteína del mar, pero experimentan frenos a su consumo o tienen otro tipo de preferencias en su dieta habitual". Serían platos de "quinta gama, apetecibles, incluso con el pescado camuflado, con facilidad de uso y formatos cómodos". La revolución, por tanto, no estará en el rediseño de la marca, sino en toda la estrategia que está detrás del nuevo equipo de marketing, con Juan Viñas a la cabeza. Están involucrados departamentos como el Comercial (con retail, foodservice y los country managers del top 5 de países objetivo: España, Portugal, Francia, Italia y Estados Unidos) o el de Estrategia, en base a la estructura matricial (no piramidal o jerárquica) por la que han apostado para relanzar la compañía tras el cambio de gestión.

Pescanova se llama Pescanova desde mediados de los años 60, y es una "marca perfecta" a ojos de los expertos por conjugar la palabra "pesca" con una especie de sufijo que hace referencia a la innovación. Una visionaria que se ha hecho visiblemente mayor y que pasará ahora por una sesión de maquillaje.