La Comisión Europea autorizó ayer el proyecto de compra de la división de componentes exteriores para coches de Faurecia por parte del grupo Plastic Omnium, aunque lo condicionó a la cesión de siete plantas en Francia, España y Alemania. Bruselas temía que la entidad surgida de esta concentración no afrontara suficiente competencia por parte del resto de actores del mercado de la producción y el suministro de parachoques de plástico en el norte, el este y el oeste de Francia, en Bélgica y en España.

No obstante, los compromisos asumidos por las dos empresas francesas han disipado las preocupaciones de la CE. "Plastic Omnium nos ofreció ceder instalaciones de producción clave con el fin de disipar nuestros miedos", explicó la comisaria europea de Competencia, Margrethe Vestager. En concreto, Plastic Omnium se comprometió a ceder cuatro fábricas de Faurecia en Francia, una en España y dos en Alemania.