Seis millones de coches circulan hoy por el mundo con climatizadores fabricados por Denso Sistemas Térmicos España en Vigo. La planta de Valadares cumple este año una década desde su instalación con 250 trabajadores en plantilla y clientes como PSA Peugeot Citroën, Opel, Renault y Mercedes-Benz. Su director general, Roberto Cavallo (Savigliano, Italia, 1966), revela para FARO que el centro acaba de firmar un nuevo pedido para Nissan en Francia y que también fabricará los climatizadores de la próxima generación de comerciales de PSA y Opel (el proyecto K9).
-¿Qué destacaría de estos últimos diez años? ¿Cuál ha sido el mejor momento y el peor?
-Durante estos diez años de historia en Vigo han predominado los hitos positivos. Destacan entre los más importantes el mes de febrero de 2005, fecha en la que contratamos al primer grupo de trabajadores; la fabricación de las primeras piezas de serie en marzo de 2006; el plan de expansión de la planta en 2011; los principios de Renault en 2012; y también en ese año, la producción del proyecto M3-M4 y la renovación del modelo B78 de PSA Peugeot Citroën. Quizá el peor momento ha sido este mismo año con la confirmación de la pérdida del proyecto de Opel, ya que nos ha encendido las alarmas sobre la necesidad de seguir siendo competitivos.
-¿Qué carga de trabajo tiene ahora la planta? ¿Se han conseguido nuevos pedidos?
-Denso Vigo realizará la producción de un nuevo modelo de Nissan que se fabricará en Flins (Francia). Además, a esto se suma la pelea por la renovación de los proyectos de Renault, para lo que necesitamos mejorar en competitividad. El nuevo proyecto de Nissan es una buena noticia que garantiza carga de trabajo adicional a medio-largo plazo y ratifica que estamos haciendo bien las cosas. Sin embargo, debemos ser prudentes y no bajar la guardia. El mercado es cada vez más exigente y tenemos que estar en una dinámica de mejora constante porque así lo demanda el sector.
-¿Permitirán esos nuevos contratos aumentar el número de trabajadores?
-Actualmente contamos con una media de 250 trabajadores, una cifra que nos permite asumir la producción de modelos actuales y los nuevos retos a los que nos enfrentamos.
-Denso Vigo fue la empresa con mayor subida salarial en 2015 y aún así ha firmado nuevos contratos, ¿cuál es el secreto?
-La empresa ha realizado un esfuerzo muy grande en la negociación del último convenio colectivo por aceptar las condiciones de los trabajadores, ya que el sector demanda una reducción de costes que debemos asumir para ser competitivos. Prueba de ello es que estamos trabajando en la automatización de los procesos tal y como lo demuestra la última línea que hemos recibido y que tiene capacidad para producir el doble que una línea manual en el mismo tiempo. En este contexto, es evidente nuestra apuesta por las personas pero también somos conscientes de que debemos ser flexibles y adaptarnos a las nuevas condiciones del mercado. Estamos en un momento decisivo por lo que debemos seguir trabajando en esta línea y ser así más competitivos.
-La pérdida del pedido de General Motors para el Corsa, ¿supondrá al final un problema a la continuidad del centro?
-Perder cualquier proyecto es una amenaza para el futuro de la compañía. Debemos ser conscientes de que nos movemos en un entorno muy competitivo y Denso debe luchar por hacerse con cada uno de los proyectos a los que se presenta.
-¿Tienen confirmación por parte de PSA sobre la adjudicación del K9?
-Sí. Por lo que a nosotros respecta, el módulo clima del K9 forma parte de un proyecto más grande que es la transversalización del mismo módulo clima para diferentes modelos.
-¿Tienen necesidad de acometer alguna nueva ampliación de la fábrica? ¿Hay alguna inversión cuantificada?
-En el año 2011 ya realizamos una ampliación de la planta con previsión de volumen de negocio que actualmente se ajusta a lo planificado.
-La expulsión de cinco trabajadores por fumar supuestamente porros en el descanso, ¿era necesaria?
-Los despidos se realizaron por una conducta intolerable durante la jornada laboral que sucedía de forma reincidente; teníamos pruebas objetivas y había sido denunciado por la plantilla en reiteradas ocasiones. Denso no puede permitir que determinadas conductas que interfieren en el funcionamiento normal de las personas afecten al desarrollo operativo de la planta. Confiamos en la profesionalidad de nuestra plantilla y por eso no podemos permitir que hechos puntuales pongan en riesgo la seguridad de los trabajadores a título individual y del colectivo en general.
-¿Cómo ve la situación de la industria gallega del automóvil en general?
-Todos los agentes implicados en la industria del automóvil de Galicia tienen que ser conscientes de la necesidad de adaptarse a las nuevas reglas del mercado fuertemente marcadas por la flexibilidad, la reducción de costes y la automatización de procesos para poder seguir compitiendo. A la vez debemos seguir invirtiendo en innovación para seguir generando valor añadido y seguir siendo competitivos. El futuro del sector dependerá exclusivamente de nosotros y de cómo seamos capaces de evolucionar.
-¿Le preocupa la posible competencia que les pueda llegar de Portugal?
-La competencia venga de donde venga es un motivo de preocupación. Nosotros debemos seguir en la línea en la que estamos trabajando y mejorar día a día para conseguir una posición que nos diferencia de la competencia en términos de calidad y eficiencia y que nos permita seguir consiguiendo carga de trabajo.
